Noche mágica la que pudimos disfrutar el pasado jueves en el Garaje Beat Club murciano. La visita de The Aristocrats suponía destacar, una vez más, a Murcia en el mapa de la mejor música en directo y así se constató con una más que aceptable asistencia aún teniendo en cuenta que era un día entre semana y que, a priori, la propuesta no estaba dirigida a todos los públicos, sino a paladares más entrenados, ya que haríamos un viaje instrumental a través de diferentes estilos que irían desde el rock sureño, al jazz pasando por el metal.

Pocas presentaciones necesitan Guthrie Govan, Bryan Beller o Marco Minnemann para los amantes del rock, el simple hecho de asociarse a nombres como Steven Wilson, Joe Satriani o Steve Vai ya dice mucho de lo que se puede esperar de un show de estos tres gigantes de la música; aunque también hay que decir que la experiencia de disfrutar de ellos en directo supera ampliamente a todo lo esperado, al menos desde mi punto de vista.

El power trío venía a Murcia dentro de la gira presentación de su último disco “Tres Caballeros” publicado a mediados del pasado año, y como era de esperar el show se basó en gran parte en presentar los temas del mismo; y cuando digo presentar lo hago en la más extensa y maravillosa amplitud del término, aunque como explicaré más adelante, parece ser que no todos los presentes disfrutaron de ello.

The Aristocrats Murcia 2016

El concierto anunciado para las 21:00 comenzó con puntualidad británica, tanto que entramos a la sala a mitad del primer tema Stupid 7 con ciertas dificultades para acceder a las primeras filas. Una vez ubicados, la primera sensación que percibí fue calidez, una calidez y buen ambiente que irradiaba el propio grupo siempre sonriente, sobretodo Guthrie Govan, a quien, en ocasiones sólo le faltaba una flauta para evocar a su compatriota Ian Anderson. La segunda sensación fue de desconcierto, al no conseguir encontrar una conexión lógica a lo que percibían mis sentidos, la simplicidad que mostraban estos tres genios al tocar discrepaba totalmente con las complejas composiciones que escuchaban mis oídos; y es que esa noche no veríamos, salvo contadas excepciones, grandes florituras, ni largos y vertiginosos recorridos a través del mástil como cabría esperar de este tipo de músicos, no veríamos a tres guitars heroes demostrando individualmente su maestría; sino que pudimos disfrutar de un grupo, con composiciones compactas y un perfecto acoplamiento entre sus miembros.

Tras Stupid 7, tal y como abren el disco, caerían Jack’s Back y Texas Crazypants, temas de Govan y Beller respectivamente, presentados por sus creadores. La primera de ellas retoma las aventuras de Furtive Jack relatadas por Govan en el primer álbum del grupo, la segunda está inspirada por un percance automovilístico que tuvo el bajista con tres americanas locas.

Los creadores de los temas se seguían alternando, por lo que era turno para Marco, quién nos presentó el cuarto instrumento que estaría presente durante la interpretación de Pressure Relief, un iPhone 6 en el que tenía grabadas las partes de teclado que tiene la canción.

Antes de que el jazz se apoderase de la sala con Louisville Stomp, llegaría la primera aparición de un tema antiguo del grupo, Culture Clash tema dedicado al choque de culturas que experimentan cuando viajan a ciertos lugares donde no terminan de entender ciertas cosas, y al choque de puños que realizan cada vez que les ocurre algo de este tipo. 

Los temas seguían cayendo presentados todos ellos por sus respectivos compositores, lo que no gustó a parte del público que se dedicaba a hablar entre ellos, a quejarse o a reírse de los que entendíamos o intentábamos entender con mayor o menor fortuna lo que nos relataban, hasta el punto que el propio Beller llegó referirse a ello, aunque sin resultado alguno. Nunca he entendido la gente que va a un concierto a hablar como si estuviera en su casa o en la calle, si quieres hablar hay miles de sitios donde hacerlo, pero si estás en un concierto, al menos, ten algo de respeto si no por el resto del público, al menos por el grupo al que has pagado por ver.

Tras Pig’s Day Off en la que vimos por primera vez al cerdo Oink, llegó el momento de lucirse de Minnemann gracias a Desert Tornado en medio de la cual se quedó sólo en el escenario para deleitarnos con una magnífica demostración de cómo se toca la batería, los micrófonos o sus propias baquetas, impresionante!!

En Smuggler’s Corridor, un tema con aires sureños inspirado por la serie Breaking Bad, nos animaron a interpretar sus coros tras varios intentos fallidos. Mientras que con The Kentucky Meat Shower llegó la mejor historia de la noche, en la que Govan nos relató la lluvia de carne roja producida en un pueblo de Kentucky debido al vómito de varios buitres que se acababan de atiborrar de carne de oso, carne que algunos de los vecinos del pueblo llegaron a comer pensando que era un regalo divino.

Con la escatológica historia llegábamos al final de concierto, 10 temas y casi 2 horas que pasaron volando, el grupo hizo amago de irse del escenario antes de preguntarnos si queríamos más, ante nuestra respuesta Beller decidió que era tontería hacer el paripé de abandonar el escenario para volver a salir por The Aristocrats Murcia 2016lo que directamente volvieron a coger sus instrumentos para la gran orgía final con Get It Like That de su primer álbum. Una orgia zoofilica debido a la aparición especial de un cerdo (Oink), un pollo y un pato, tres invitados especiales que ya habían hecho acto de presencia anteriormente, pero que ahora se convertían en parte central del show. Oink volaba por encima de la batería evocando la portada del Animals de Pink Floyd, mientras que el pato y el pollo representaban sendos solos vocales; todo un espectáculo para cerrar el que fue mi primer concierto del año y que apunta a estar en el Top 10 de 2016.

Setlist

  1. Stupid 7
  2. Jack’s Back
  3. Texas Crazypants
  4. Pressure Relief
  5. Culture Clash
  6. Louisville Stomp
  7. Pig’s Day Off
  8. Desert Tornado
  9. Smuggler’s Corridor
  10. The Kentucky Meat Shower
  11. Get It Like It