dry river 2038

Dry River son una banda nacida en Castellón de la Plana. El grupo se formaba en 2004 cuando los componentes de la ya extinta banda ‘Marea Negra’ se unían a Matías Otero (Arizona), formando así Dry River. Los de la Comunidad Valenciana han sacado este año el disco que los ha catapultado en el panorama: 2038, relegándolos a una posición privilegiada en cuanto a lo que el mundillo del rock progresivo se refiere. Habiéndose pateado buena parte de nuestro territorio y con una gira que los va a hacer seguir quitándose ciudades de su haber (entre las cuales se incluye Murcia, la cual visitarán el próximo 13 de abril), hemos preparado unas cuantas preguntas para la que, seguramente, sea la banda de rock progresivo nacional del momento. Comenzamos:

Muy buenas, chicos. Antes de nada, felicitaros por este inmensísimo disco que habéis sacado. Si bien siempre os ha gustado el rollo ecléctico y habéis demostrado saber moveros muy bien en ese terreno, ¿se ha notado un cambio muy grande en este disco a la hora de componerlo y llevarlo a directo respecto a los anteriores?

Cada disco es una especie de fotografía del momento en el que se encuentra el grupo, tanto a nivel personal como musical. Estamos en un muy buen momento de madurez en estos dos aspectos y esto se ve reflejado en las composiciones y en el sonido del álbum. En los directos estamos gozándolo como nunca. Sabemos que este es nuestro mejor disco y cada vez que lo tocamos sobre el escenario es un subidón.

¿Habéis cambiado/ampliado vuestro abanico de influencias?

Los clásicos siguen estando ahí y dudo que alguna vez desaparezcan de nuestras influencias. Sin embargo, es verdad que vamos descubriendo música y artistas que nos inspiran mucho, no solo musicalmente, sino también en el sonido, la manera de entender la música, etc. Como todo en la vida, en la música hay una evolución constante y también ocurre en los gustos personales de los miembros del grupo. Esto natural y deseable que esto ocurra.

‘2038’ es una prueba irrefutable de que habéis compactado un sonido que desde el principio sabíais vuestro. Todo el disco posee un aura de madurez que te envuelve; riffs que te enganchan y machacan y melodías pegadizas que se pegan a tu cabeza como un chicle, todo ello acompañado y bien orquestado por los ritmos de vuestro batería Pedro Corral. Contadnos un poco acerca del proceso de composición de este disco.

Pues la verdad es que cada canción ha tenido su historia a la hora de componerse. Para resumirlo, se podría decir que existen gérmenes, lluvias de ideas, letras, riffs… cosas que nos ponen en marcha para componer un tema, y luego Carlos se encarga de escribirlo todo, hacer los arreglos, componer… vamos, que es el más atareado de todos. Más adelante, cuando el tema está terminado, se lleva al estudio para grabarlo y ahí, por ejemplo, Manuel Tomás, que es quien nos ha hecho sonar como un cañón, también aporta ideas y se cambian cosillas.

dry river 2038

 

¿Teníais claro que queríais que fuese este disco el que ibais a sacar u os dejasteis llevar por lo que iba saliendo en el momento?

Teníamos claro que este disco tenía que suponer un punto de inflexión en nuestra carrera. Sabíamos en el momento en el que nos encontrábamos y sabíamos las canciones que estábamos componiendo, así que no había muchas dudas. Por eso hemos apostado fuerte por él. El esfuerzo de tiempo, dinero y energía que hemos empleado y seguimos empleando en este disco es brutal, pero vale la pena. Estamos muy satisfechos y muy convencidos de que apostamos a caballo ganador.

¿Nos podéis contar alguna anécdota graciosa que ocurriese durante el proceso de grabación?

Graciosa no sé… suele pasar que cuando grabamos los discos ocurren desgracias. En el anterior, a Carlos le dio un cólico, en el primero le robaron el disco duro con los masters, en este, se le rompió el disco duro donde tenía muchísima información… Matías tuvo un pequeño accidente con la moto, etc. Por suerte, nada grave.
Como nos gusta mucho la tontería, ahora celebramos cualquier cosa mala que nos pase porque eso quiere decir que va a salir un disco cojonudo.

En enero comenzabais una gira que va a durar hasta el 25 de mayo y que os está haciendo visitar buena parte del territorio español. ¿Estáis notando una mayor afluencia de público en vuestros conciertos?

¡Mucho mayor! Con la anterior gira ya empezábamos a tener buenas cifras de público, pero en esta la cosa se ha desmadrado por completo. Por ejemplo, llevamos ya 2 “sold-out”, uno en Castellón y otro en Madrid. Esto es algo increíble, la verdad. Además, en el resto de ciudades también estamos teniendo mucho público y eso nos da la vida.

¿Seguiréis añadiendo fechas? ¿Tenéis algún compromiso internacional?

Esto no para. Tenemos fechas cerradas ya para octubre y noviembre incluso. Haremos cosillas este verano y cerraremos la gira a lo grande en 2019. De momento no salimos de España. Nos quedan muchos rincones por visitar, pero ya se está moviendo algo para tocar en algunos sitios de Europa. Todo llegará. Os mantendremos informados.

¿Actualmente, qué podemos esperar de un concierto de Dry River?

Un concierto divertido, de gran calidad musical y un ambiente inmejorable. Somos un grupo que se divierte en el escenario, lo pasamos realmente bien y nos gusta compartirlo con la gente. Es lo mejor de todo esto. Cuando vas a una ciudad y ves a gente que no conoces cantando tus canciones, vibrando y disfrutando contigo… es espectacular.

El año pasado sacabais vuestro primer DVD tocando en directo «Rock & Rollo… ¡Y Caña!». ¿Supone este directo un final de etapa para vosotros? De ser así, ¿qué podemos de esperar de estos nuevos Dry River cuando ya nos han dado en la cara con este último ‘2038’?

En efecto, el DVD del directo era una manera ideal de cerrar una etapa. Cuando lo publicamos ya teníamos grabado “2038”, así que sabíamos lo que se avecinaba.
En el futuro, seguramente hagamos lo mismo con esta nueva etapa, pero de momento estamos centrados en girar, girar y girar, exprimir al máximo este disco y, cuando llegue el momento, seguramente le demos el cierre que merece.

Llegados a este punto me gustaría felicitaros por el concepto que elegisteis para vuestro videoclip «Me va a faltar el aire», así como su ejecución. ¿De dónde os vino la inspiración para elaborar esta idea?

Todo vino de un vídeo que se hizo viral en las redes sociales en el que las chicas de HEART homenajeaban a Led Zeppelin en el Kennedy Center. Ese vídeo nos impactó y pensamos que sería alucinante ponerse en la piel de Led Zeppelin. Empezó casi como una fantasía, se lo comentamos a Jorge Benavent y el muy insensato nos dijo que se podía hacer… así que nos pusimos manos a la obra y nos metimos en un buen lío del que salimos airoso gracias al saber hacer y a la colaboración de muchísima gente.

 

¿Fue el proceso de grabación tan loco como lo refleja el videoclip?

Ni te lo imaginas. Nosotros somos músicos y de repente nos habíamos metido en una producción gigantesca. Tuvimos muchísima ayuda de muchísima gente y al final todo salió mejor de lo que habíamos imaginado, pero los MESES antes de la grabación de los vídeos fueron caóticos, estresantes, locos, insanos…

¿Siempre habéis tenido un especial cuidado a la hora de realizar videoclips, creéis que es la mejor manera de llegar al público?

El consumo de música es audiovisual. “Video killed the radio star”, ¿no? Es igual de importante la imagen que la música en si misma. Un buen vídeo te puede arreglar una canción y un mal vídeo puede desvirtuar un temazo. Somos muy conscientes del poder de los vídeos y tenemos muy claro que debemos tratarlos al mismo nivel que la música. De hecho, el disco salió meses después de estar terminado precisamente para esperar a los vídeos. Hicimos bien, ¿verdad?

En vuestra discografía encontramos temas alegres y con mucho humor como «Se lo monta bien», «Irresistible» o «Traspasa mi piel» conviviendo con otros muy serios y críticos como «Rosas y Gaviotas», «Frascos vacíos» o ¿Cuánto vales tú?” ¿Cómo conviven temas tan distintos en el mismo trabajo?

La música es un reflejo de la vida misma. Uno no siempre está feliz o cabreado… al menos si tiene una vida equilibrada, claro, que hay gente para todo. La música es un lenguaje capaz de comunicar muchos tipos de emociones y de pensamientos, así que la utilizamos para compartir todo lo que nos pasa, tanto lo bueno como lo malo, lo divertido, lo épico, lo irónico, la crítica social… todo. Es como hablar con un buen amigo con quien compartes todo tipo de temas.

 

Y para finalizar… Dentro del amplio abanico que abarcáis dentro de la música rock y con influencias tan claras en vosotros como lo son Queen, Jethro Tull o Deep Purple me gustaría preguntaros: ¿cómo catalogaríais vuestra música? ¿Si un fan del rock os viene de 0 sin haber escuchado nada vuestro, qué le diríais para que esa misma tarde se escuche vuestros discos?

Esta suele ser la pregunta más difícil. Pues mira, hacemos rock ecléctico o, si lo prefieres, rock bueno. ¡Jajajaja! Nuestros discos son como los clásicos de los 70 en el sentido en el que, aun siendo un grupo de rock, en un disco te puedes encontrar estilos muy variados, porque toda la música está bien… y a lo que está bien no vale la pena renunciar.
Si nunca antes nos has escuchado, te invito a que lo hagas sin prejuicios basados en etiquetas.

Nada más, un verdadero placer hablar con vosotros, chicos. Nos veremos el 13 de abril en la Garaje Beat Club. ¿Os gustaría añadir algo más?

Simplemente daros las gracias por la difusión. Esperamos veros en Garaje Beat y charlar en vivo, que siempre es agradable. Y al lector que haya llegado hasta aquí, pues darle también las gracias y espero que tengamos la oportunidad de charlar un rato en algún concierto también. ?