Crónica Download Festival 2019 (sábado): ‘Slipknot revientan la Caja Mágica’

Slipknot revientan la Caja Mágica a ritmo de sus clásicos y de sus canciones nuevas. 

Este es sin duda uno de los días más esperados por los asistentes del festival. Tanto es así que contaba con aproximadamente el doble de asistencia que el día anterior. Esto no se debe a otra cosa que a la actuación estelar de Slipknot, grupo ya considerado de culto por los amantes del metal. La expectación estaba altísima a causa del disco que está por venir además de su impresionante directo. Por si esto fuera insuficiente, bandas como Red Fang, Rival Sons, Amon Amarth o Leprous se encargaron de hacer todavía más potente el cartel.

La calurosa tarde comenzaba desde nuestro punto de vista con los barceloneses Graveyard. Con su propuesta de Death Metal, la banda aumentó unos cuantos grados la ya altísima temperatura pero que, sin embargo, dejó buen sabor de boca a los asistentes algo tostados bajo el sol. Cabe mencionar que algunas personas se esperaban a la banda sueca de Hard Rock y, sin embargo, quedaron sorprendidas por su directo. Tras un show de 35 minutos, la banda se despedía del público dando las gracias por su asistencia.

Antes de encaminarnos al próximo concierto quisimos echar un vistazo a lo que estaba sucediendo en el Stage 4 con El Altar del Holocausto. El grupo de Salamanca tenía a numerosos adeptos asistiendo a su particular ritual. Ataviados con sus clásicos trajes blancos simulando a los capirotes, dieron un recital que dejó al público bastante satisfecho, a juzgar por los comentarios que se oían.

Tras esto tocaba el turno de los titánicos Red Fang. Los de Portland eran una de las bandas más esperadas del día, tanto por la afluencia de público como por el caluroso apoyo con el que contaron. Tras un show de 50 minutos pudimos oír temas como Wires, Throw Up o Prehistoric Dog ya clásicos en su discografía. Por otra parte, también tuvimos la inmensa suerte de escuchar Antidotes, una canción “nueve”, como diría el simpático frontman Aaron Beam. Sin duda alguna, la potencia y la increíble sonoridad conseguida por el conjunto de Stoner y Sludge hicieron que fuera uno de los conciertos más recordados por el público.

Prácticamente corriendo fuimos al siguiente concierto que se solapaba por 5 minutos. La banda subida al escenario eran los increíbles Ànteros provenientes de Barcelona. Su música, caracterizada por ser una mezcla de post-rock y hardcore, conseguía aunar la melodía y las emociones asociadas al post al mismo tiempo que contentaban al público más metalero con un sonido duro y de muy alta calidad que llevaba inevitablemente al headbanging. Una gran sorpresa para todos fue el buen estado de ambos vocalistas, los cuales hicieron un concierto muy notorio, llegando a sonar mejor que en el álbum. Su setlist se basó en gran medida en su excelente trabajo Cuerpos Celestes (2017), con un repaso de sus canciones más destacadas.

Tras la finalización de este concierto, quisimos echarle un ojo y un oído a uno de los grupos más destacados del panorama de rock actual. Rival Sons venían de California dispuestos a hacernos disfrutar con el rock más clásico pero más rompedor al mismo tiempo. Con un conjunto de canciones enfocadas en su nuevo trabajo Feral Roots (2019) tales como Back in the Woods o Do Your Worst, hicieron las delicias de los espectadores, ya que deseaban con fervor escuchar nueva música de la banda que no pasaba por España desde aquella edición del Mad Cool el pasado año. Uno de los puntos fuertes de la banda es la increíble voz de su frontman Jay Buchanan, digna de mención.

Después, estuvimos viendo a los vikingos Amon Amarth. Con una puesta en escena rompedora utilizando efectos visuales como el fuego o la batería colocada sobre un casco vikingo, los suecos dieron un espectáculo. El set se centró fundamentalmente en su nuevo álbum Berserker (2019) con canciones como Crack the Sky o Shield Wall y de su álbum más aclamado, Deceiver of the Gods (2013) con canciones como As Loke Falls o Guardians of Asgaard. Tras una hora de puro metal, la gente acabó bastante satisfecha por la impresión recibida del show.

Antes de pasar a uno de los platos fuertes de la noche, fuimos a ver un rato otro grupo que por desgracia se solapaban. Estos eran Will Haven. Teníamos unas expectativas altas acerca de la banda procedente de California por su propuesta musical rompedora. Sin embargo, el concierto resultó ser algo aburrido por la similitud de todas sus canciones. Aun así, cabe mencionar la potencia del directo, que mantuvo activos a todos los asistentes. El sonido si bien fue algo alto, se puede decir que mantuvo la fuerza de la música que transmitía la banda.

Llegaba el turno para Stone Temple Pilots de sacudir Madrid. El mítico grupo noventero volvían a España para ofrecernos un show repasando lo mejor de su discografía. Sonaron sus grandes éxitos tales como Wicked Garden, canción de apertura, Vasoline o Sex Type Thing. El reciente vocalista Jeff Gutt hizo una soberana interpretación de todos los temas dejándolos a la altura de Scott Weiland, el cantante que más ha perdurado en la banda hasta su expulsión y posterior fallecimiento. Tras una hora de show dejaban paso a la otra banda central del día, los titanes Slipknot.

Slipknot es la banda que más gente reunió en esta edición del Download Fest Madrid. Es por esto por lo que las expectativas estaban más altas que nunca. Ya desde una hora muy temprana la gente se agolpaba para poder tener un poco más cerca a Corey Taylor y los suyos. Con diez minutos de retraso, el concierto dio sus primeros compases con el tema People=Shit que ya desde sus primeras notas formó grandes moshpits además de poner a la gente a saltar como loca.

La puesta en escena era digna de un concierto de Slipknot. Con esto no me estoy refiriendo a la mera parafernalia técnica, sino a la ambientación que generan sus músicos. Todo esto gracias a las máscaras, la disposición del escenario, sendos percusionistas golpeando al ritmo de la música y haciendo headbanging. Se creaba una atmósfera en la que el espectador es capaz de sacar esa rabia y vocear tal como lo hacen esos locos enmascarados que tiene enfrente, más propios de una película de terror que de un concierto de rock. Si por algo se caracterizan Slipknot es por crear esa ambientación que da pie a desatar la locura que se sobrevino en todo el show. Utilizando las mismas palabras que Corey, vivimos un concierto en el que una gran parte de ‘crazy motherfuckers’ se desató disfrutando y desinhibiéndose como nunca.

Aparte de tocar grandes temas como Psychosocial, The Devil in I, Custer o Duality también pudimos escuchar algunas canciones, ya presentadas, del próximo disco como Unsainted y All Out Life. Uno de los momentos más impresionantes se sobrevino tras el encore, en el que durante la canción Spit it Out, Corey mandó sentarse a todo el público para que en un momento determinado todos se levantaran a saltar. Esto generó una imagen impactante y uno de los momentos de mayor locura que perdurará durante mucho tiempo en nuestras memorias. Tras esto, la finalización del concierto llegó con Surfacing, que puso punto y final a uno de los conciertos más impresionantes vividos en España en los últimos años.

Con algo de retraso provocado por el concierto de Slipknot, los noruegos Leprous venían a relajar un poco el ambiente. Con una formación bastante sólida a causa de la inclusión de última hora del violoncelista Raphael vinieron tocando los temas de su último disco Malina (2017) con una potencia plena.

Abrieron con la creciente Bonneville para seguir con su potente Stuck. Uno de los momentos de más intensidad del concierto vino dado por Angel, una versión reciente del tema de Massive Attack que, particularmente, tenía muchas ganas de escuchar y en especial sabiendo que traían un violoncelo con ellos. Tras esto vino The Price, uno de sus temas más queridos que fue coreado por el público desde los versos hasta el riff. Tras cerrar con From the Flame, los noruegos encabezados por Einar Solberg se llevaron una grata ovación del público que, al ser muy querido en España y tocar prácticamente cada año, siempre acaba sucediendo de la misma forma.

Para cerrar un exitoso y agotador día faltaba una de las propuestas más interesantes del día que venía de la mano del synthwave de Perturbator. Las composiciones del músico francés James Kent sirvieron de colofón a una noche perfecta. Con su característico sonido electrónico synthwave influenciado por géneros como el Black Metal fue uno de los conciertos más originales. Supuso una nota bastante diferente en comparación con el resto del cartel, cosa que se agradecía enormemente. Tras una hora de show en el que, sorprendentemente, había bastantes personas dándolo todo a pesar del cansancio acumulado del día anterior. Pusimos punto y final a la jornada intermedia del Download, con ganas de descansar para el día siguiente, ya que lo que se nos venía encima no era para nada relajado.