Crónica y fotos: Carlos Santana en Alicante

Alicante. Noche tropical. Ni un soplo de viento. Humedad relativa del “tropecientos por ciento”. Treinta grados en el termómetro y la plaza de toros llena esperando a uno de los Guitar Hero más singulares que hay. Parecía como si alguien desde arriba hubiera decidido convertir Alicante en el Caribe para recibir a Carlos Santana, el guitarrista mexicano que sobrevivió a Woodstock y que nos visita de la mano de Horizonte Musical.

Sin teloneros y puntualísimo, Santana pisaba las tablas a las 22:29h acompañado de su esposa Cindy Blackman a la batería (la mejor de la banda sin duda) junto con otro baterista, un percusionista, teclista, bajo, guitarra rítmica y dos cantantes (uno de ellos también soplaba los metales), vamos, lo que viene siendo una gran banda, con músicos muy experimentados, a destacar el bajista Benny Rietveld que era el que le “alisaba el camino” a Carlos Santana para que este pudiera pasearse con sus solos eternos.  

Santana vino a no arriesgar y centró su repertorio en “supernatural” aquel disco que recibió más grammys que canciones tenía. Teniendo en cuenta que una gran parte del público no iba a conocer demasiado fuera de ese disco, podríamos decir que fue un acierto la elección.

carlos santana alicante

Carlos está joven, o lo parece. Toca con la misma ilusión que hace 30 años. Debido a que se trata de un Guitar Hero, me vais a permitir que hable un poco del equipo: Santana lucía dos modelos nuevos de guitarras PRS con forma más similar a las Les Paul de Gibson que su modelo signature. El ampli, el de siempre, un pequeño combo de la marca Mesa Boogie que, para quien no lo sepa, Santana fue quien bautizó estos amplificadores al pedirle a un amigo técnico si podía meter un enorme amplificador Fender en un mueble pequeño y hacerlo portátil… El técnico (fundador de Mesa Engineering) lo consiguió y se lo llevó a Carlos que al probarlo subió el volumen a tope y el pequeño ampli empezó a bailar por la potencia, a lo que Santana exclamo “It boogies” y fin de la historia. Así comenzó de una de las más grandes marcas en amplificación de la historia.  Un Tube Screamer y un Wah Wah que parecía ser un custom de Real McCoy y juraría que un Mu-Tron, también un Delay que se escuchaba, pero no se veía, remataban el equipo, el resto del sonido son los dedos.

carlos santana alicanteRespecto al concierto, el sonido abajo no fue el mejor del mundo según me comentan, decía que a la guitarra de Carlos le faltaba potencia. Arriba desde grada sonaba perfecto, la verdad, sonido típico Pro de las grandes bandas.   El concierto empezaba con una intro con sonidos muy étnicos que daba paso a “Jin-go-lo-ba”, de su álbum Santana de 1969. “Evil ways” la fusiona con “Love supreme”. “Black Magic Woman” fue para mí sin duda la gran destaca de la noche. Tras “Oye como va” Santana se dirigía a la plaza para dedicar los siguientes temas a “Django Reinhardt, Paco de Lucía y a todos los gitanos y gitanas que hacen lo que hacen con pasión y dulzura”, un fallo habitual en muchos el pensar que Paco de Lucía era gitano, quizá por ser el único “payo” con alma gitana, al igual que Eric Clapton es el único bluesman negro que había nacido blanco.

A mitad del concierto, Carlos Santana, presenta a Javier Vargas que sube a tocar un tema. Fue algo extraño pues el ampli de Javier había que montarlo y sonorizarlo, lo cual llevó algo de tiempo y rompió la magia del momento.  Tocaron “total destruction to your mind” que acabó convirtiéndose en el “Satisfaction” de los Stones para volver a su sitio antes de terminar el tema.

“Mona Lisa” y “María María” eran las siguientes, en este caso Santana las dedicaba a los locos, decía “si no te vuelves loco eres un cínico, hay que volverse loco para ser feliz” y los cantantes empiezan a guiar al público, “abajo, ahora arriba, izquierda… etc…” mientras Carlos se acababa la escala dórica por enésima vez en el mástil de su PRS en una suerte de improvisación / jam session interminable. “Corazón espinado” pone en pie a toda la plaza de toros de Alicante tras la cual viene otro descanso con “Toussant l’Overture” y un solo de batería a cargo de Cindy Blackman que hizo un concierto realmente espectacular a la batería.

Llegan los bises: “Smooth” con la que presenta a la banda, “Roxanne” de The Police y un “Voodoo Child” de San Jimi Hendrix apenas reconocible por el compás caribeño marca de la casa.

carlos santana alicante

Santana es Santana, esto que parece una obviedad es así, sabes lo que vas a ver, un guitarrista único con un sonido muy personal. Hay veces que tienes la sensación de estar escuchando la misma canción 15 veces, pero entonces se sale del guion y te rompe los esquemas con una nota imposible o con un toque de maestría, para, segundos después volver a su “soniquete” habitual que es la zona de confort de este músico.

Nos subimos al coche y con el aire acondicionado parece que se nos empiezan a aclarar la ideas y comentamos el setlist…

-Oye ¿y “Europa”?

-Yo juraría que la han tocado… ¡Repasa las notas anda!

-Pues yo no la tengo…

-Ni yo, pero juraría que si…

Llamamos a unos compañeros y estaban igual que nosotros… Esa noche todos escuchamos “Europa” pero en realidad nunca la tocaron… cosas del calor o de la Black Magic Woman… vaya usted a saber.