vita imana aquelarre

Un año más, el Aquelarre Metalrock Fest se presentaba como una cita ineludible en nuestra agenda. El festival fue un auténtico éxito el pasado año gracias, entre otras cosas, a la magnífica organización y grandes actuaciones de grupos como Skunk D.F., Killus o Morphium. Las expectativas estaban altas y podemos decir que no sólo cumplieron, sino que en general se mejoraron las buenas sensaciones del pasado año.

El festival volvía a apostar por un cartel variado en el que el metal era el protagonista, pero podíamos encontrar bastante variedad de subgéneros como el death metal de Semilla Animal, el Heavy de Guadaña o el Groove de Vita Imana. Un festín para cualquier amante del metal en todas sus variantes.

Red SoilPoco después de las 18:00 salían a escena Red Soil ante una sala bastante concurrida teniendo en cuenta la hora que era. La cerveza y el jamón gratis fueron todo un acierto, de hecho lo copiamos para nuestro Rock Culture Fest, sirviendo de aliciente para estar en la sala a primera hora de la noche. El premio era doble, ya que a parte de comida y bebida gratis, podría disfrutar de la actuación de la joven banda y su metal melódico. El grupo nos dejó algunos de los temas de su ep Origin * Fall * Caos como Kaileena, Stranded o Evolve, además de alguna versión como The Quiet Place de In Flames o Silvera de Gojira.

Alfonso Rock Culture

 

Una vez entrados en calor y cuando el personal ya había dado buena cuenta del jamón y la cerveza gratis, saltaron a escena los castellonenses Six Burning Knives.
Personalmente tenía muchas ganas de verles en directo, porque me tienen enganchado y los astros se habían alineado en mi contra en sus anteriores visitas al sureste. Por fin tuve el placer de tenerlos ante mí y en una gran sala, y vaya si colmaron mis expectativas.
Los de Villarreal comparten con sus paisanos Killus, que pasaron por este festival la anterior edición, el gusto por una estética algo industrial que también reflejan con pinceladas en su sonido. Su marca de la casa es la fuerza que le ponen desde el primer segundo a su metal Six burnings knivesalternativo directo y plagado de letras de denuncia social. La rabia que destila la imagen de su frontman es la misma que nos transmitieron sus poderosos riffs de guitarra. Se trata de una banda muy compacta, que en apenas un par de años ha crecido enormemente, a pesar de llevar unos 10 años juntos. Con un EP titulado VI tuvieron su estreno discográfico en 2014 y el pasado 2016 dieron el salto con su primer largo Knife Therapy, tras una exitosa campaña de crowdfunding. Intercalaron perfectamente temas de ambos trabajos, demostrando que se manejan muy bien en los distintos registros que caracterizan su cocktail molotov que tanto me encanta. Metalcore, Groove Metal, Hardcore, Sludge y algo de Stoner macarra, con detalles de bases electrónicas pre-grabadas que aportan el toque industrial ya comentado hacen que no pares de partirte el cuello en todo el concierto. Arrancaron con la atronadora Blood And Sand y subieron las revoluciones con The Truth, primeros 2 temas de su último trabajo. Flipé especialmente con Looking For A Nemesis y M’animal, que fueron los primeros temas que escuché de ellos años atrás. También nos adelantaron que su próximo video oficial será del tema Steinner, que también tocaron. Cerraron el setlist con los dos temas aplastantes que cierran también su Knife Therapy: From Ashes To Flames y The Hole. Un setlist muy acertado ya que te engancha de lleno en este trabajo de estudio que confirma que son una de las bandas más prometedoras del metal nacional, preparados de sobra para repartir cera al lado de bandas como Hamlet o Vita Imana ante grandes audiencias.

Manu Hernández

 

Tras dos primeras magníficas descargas que nos hicieron entrar en calor, llegaba el turno de los zamoranos Death&Legacy. Reconozco que Death Legacyera la primera vez que los escuchaba y he de decir que quedé gratamente sorprendido con su actuación, sobretodo con esa mezcla vocal entre los melódicos de Ely y los guturales de Jesús. El grupo hizo un repaso a sus dos discos publicados hasta la fecha Burning Death y su más reciente Silence, publicado en 2016. Entre el público había seguidores del grupo y algunos (como yo) que los escuchaban por primera vez, así que el grupo haría todo lo posible por acabar metiéndose en el bolsillo a ambos. Salieron a escena como un huracán descargando temas como Deliver us from evilAs I DieStart to Fall. Con un Garaje que contaba ya con una muy buena entrada, el grupo seguía descargando temas como SilenceBurning Death hasta llegar al final con What never will be. Una magnífica apuesta por parte de la organización que dotó de más variedad aún si cabe al festival.

Alfonso Rock Culture

Semilla AnimalUna de las mejores bandas de la región dentro de la escena del metal en estos 18 años que llevan dándolo todo y siguen arrasando allá donde van con su salvaje death metal.
Presentando su tercer y último trabajo El Tío del Saco, los murcianos comenzaron su concierto con una intro en la cual se llenó el escenario de humo y salió a escena una persona disfrazada de hombre del saco con una túnica larga con capucha y un saco en el cual había muñecos simulando niños dentro.
Nada mejor para arrancar un concierto que creando una atmósfera para introducirte de lleno en el espectáculo.
Seguido de los temas La Cuchilla, Nacido para odiar y la canción homónima del disco El Tío del Saco, todas de este último trabajo.
Una descarga brutal de adrenalina contagiosa que sólo hacía que la gente se volviera más animal… como ellos.

Continuaron con una versión de la canción Breed To Breath de Napalm Death, una de las bandas de brutal death metal más importantes del mundo, de la que se nota la gran influencia en Semilla Animal y a la cual además tendremos por Murcia en un par de meses en la misma sala,
con lo que nos pusieron los dientes largos a más de un fan presente.
Claustrofobia es lo que provoca el tema con los desgarradores guturales de Enrique, que vino dispuesto para quedarse en la banda hace un par de años junto al segundo guitarrista, Vicente.
Después del acomodamiento de esta nueva formación, la banda lanzó el tercer trabajo con el que giran actualmente y que demuestran que las adversidades no les frenan, ni mucho menos, les dan más fuerza con la cual poder plantar más aún la semilla del death metal.
Y entre algunas canciones más del nuevo disco y otras de los anteriores trabajos Metal Salvaje y Escarnio; acabando ya su tiempo por desgracia, Mosquito Cabrón, Exterminio y cerrando un directo realmente bestial, con el tema Hijo Puta para terminar de volver loco al público de la sala. Un concierto que se nos hizo muy corto pero que destrozó las mentes y los cuerpos de más de un asistente.

Zoe Lilith

 

Los madrileños Somas Cure no podían faltar a su cita con Murcia que se viene repitiendo en los últimos tres años habiendo repetido este 2017 al haber estado presentes también en el Vesania Metal Fest de Lo Pagán. Desde que un servidor les echó el ojo allá por 2013 cuando cayó en mis manos su primer trabajo Parseval (2012) les he visto parir 3 discos más y unas cuantas veces en directo (tres este año 2017), confirmando mis sospechas de que si nada se tuerce van camino de cumplir mis augurios de banda grande a nivel nacional. Quizá esto sea más fácil tanto por el hecho de que parte de su trabajo musical nos recuerda cositas tanto del metal accesible de Sôber o Skunk DF como por el innegable aura de “rock stars” que difícilmente se pueden quitar de encima (ni falta que les hace).

Entiéndase esto como algo positivo. Los chicos saben estar encima de un escenario. Dominan a la perfección la interacción con el público. Tienen un vocalista carismático y con un amplio chorro de voz (Txema Fonz) y entre ellos existe una química de colegas que hace que se diviertan demostrando altas dosis de complicidad. Qué más quieres si lo que vas a ver es una banda de rock en directo?

Somas Cure

Pues sí, hay más. Hay una carrera discográfica en poco tiempo que les permite ir más allá de ese metal accesible que comentaba. Además de tener en su haber unos cuantos himnos con la perfecta fórmula de riffs de guitarra cojonudos, melodías pegadizas y estribillos que te invitan a cantarlos, como es el caso de Equilibrium o Bitácora (tema en el que el legado de Sôber más que patente), son capaces de sumergirnos en el caos frenético de La Huida y la oscuridad de Kelt, temas que pasan de lo casi extremo a lo melódico y donde Txema nos enseña lo que es capaz de hacer con su voz: a veces lírico, melancólico, brutales growls, screams, agudos en falsete y en general una voz muy personal con un timbre y amplitud que si sabe cuidar y controlar nos va a dar muchos años de alegrías.

Ahí precisamente es donde vi una mejoría en relación a otras actuaciones en las que he visto a un Txema más pendiente de “representar” lo Somas Cureque canta y de improvisar virguerías con la voz que de domar a esa fiera que emerge de sus cuerdas vocales de manera que no desentone con el resto de la banda a la hora de interpretar lo que tan brillantemente han grabado en disco.
Otra cuestión que me llama la atención es justamente la relativa a la calidad del sonido, en especial de las guitarras en sus directos. Me quedo a veces con las ganas de escuchar con nitidez algunos riffs de Álvaro y la guitarra solista de Borja. Sin embargo no tengo queja alguna de Vitti al bajo y Rubén a la batería, base rítmica espectacular. Todo esto lo digo desde el punto de vista de alguien que es muy fan y quizás soy tan exigente porque sé lo que son capaces de crear. Tienen margen de mejora, por supuesto que lo tienen, son buenos músicos, tienen personalidad, llevan 4 o 5 años sin parar, y los que les quedan.
Respecto al setlist, la mitad de los temas fueron de Éter su último trabajo lanzado en enero de este 2017, bien intercalados con los otros mencionados, destacando la perfecta Llueve y cerrando con una apoteósica Helios que dejó un buen resumen de ese estilo que a día de hoy les coloca como banda con ese algo especial que hará que los ames o los odies. Tiempo al tiempo.
Por decir que me quedé con ganas de algo, me hubiera encantado escuchar esa versión de Snuff de Slipknot que grabaron para el recopilatorio de versiones The Bipolar Sessions #2 de ROCKZONE. Hubiera molado bastante, sí.

Manu Hernández

Turno para Guadaña, que ponían la nota más heavy a la noche. Capitaneados por Salva y Glory el grupo demostró porque son uno de los grupos punteros en su estilo en España. Abrieron con Aun sigo en pieSer uno mismo, tal y como comienza Karma su último trabajo de estudio publicado en febrero de este mismo año. Más de siete años de historia, tres discos y muchos conciertos tras sus espaldas han hecho que el grupo tenga muchas tablas y eso se nota en su directo, en el que no paran de moverse y de animar al público. Las dos voces de la banda encajan perfectamente cuando suenan unidas y tienen contundencia y personalidad más que suficiente cuando cobran protagonismo individualmente. Por su parte, tanto la base rítmica como la guitarra de Juanma Patrón, último miembro en unirse a la banda, forman un tridente perfectamente engrasado.

Guadaña

Viajamos por un momento a 2014 con la potente Yo soy la Ley de su disco Deryaz. Pero volvemos rápidamente a Karma con temas como Dios del trueno, La suerte o El Bosque. No cabe duda de que el grupo suena actual, aunque menos duda aún hay de las influencias más que notables del heavy patrio más clásico como Obús o los primeros Saratoga, con toques épicos y power de Tierra Santa o Warcry.
La fiestera Nuestra Revolución nos acerca al final del concierto, que desemboca en el homenaje al mundo del rock que es Como Hermanos, y en el fin de fiesta con el tema que da nombre a su último álbum.

 

Alfonso Rock Culture

Y llegó el momento de Vita Imana, la banda más esperada del festival y de la noche, qué decir.
La sala Garaje Beat se llenó hasta los topes, la gente se agolpaba ante el escenario y se volvió loca de inicio a fin en un no parar de circle pits, wall of deaths y locura desenfrenada ante los madrileños, girando con su último álbum El Mal y que no decepcionaron al público en ningún momento.
Ni siquiera a la altura de la tercera canción, cuando un inesperado problema técnico los dejó a todos en el escenario completamente sin sonido, casualmente cuando el vocalista, Javi, pegó un salto hacia la muchedumbre y todos pensamos que se había llevado los cables por delante; más tarde descubriríamos que fue por un fan que volcó la cerveza justo en ese momento, creando toda la confusión y el desastre que la banda sobrellevó de una forma muy profesional y siguieron con toda la bestialidad y la potencia que irradia cada uno de ellos por los poros.Vita Imana

Con el setlist más largo de la noche, arrancaron con el tema Génesis proveniente del último disco, seguido de Gondwana arrasando como una apisonadora y Ablepsia (del disco Oceanidae) en la cual pasó el incidente comentado anteriormente. Seis Almas continuaba abriendo el camino de la bestia, una bestia insaciable e imparable. Romper con Todo de los temas icónicos de la banda y que no se hizo esperar; de un discazo redondo Uluh.
Irreversible, Un nuevo sol y Corpus seguían poniéndonos a prueba de resistencia física, porque estos madrileños llevan un ritmo difícil de seguir si te pones al 100%.
Y llegaba el tema, El Mal abriendose paso en la sala, en cada uno de nosotros. Perdimos la cuenta de las veces que Javier saltó en el escenario, de las que saltó al público, en una velada a la que la plabra brutal se le queda corta a la hora de describirles.

Vita Imana

En la tercera parte llegaban los temas Vacío, Mi Camino y Nueva Vida también de su último y gran trabajazo, subiendo en el listón junto a Uluh y Oceanidae. Animal llegaba para partirnos en dos y machacarnos el cuerpo de arriba a abajo.
Ya llegamos al cierre de Vita Imana, llegabamos a la recta final de la brutalidad hecha carne pero nuestros vecinos de la capital no se iban a ir así como así.
Tenían que seguir rompiéndonos hasta el final, hasta que nos doliese el alma a todos los que estábamos allí, en una sala a reventar y disfrutando como muy pocas veces se hace. Y eso hicieron, por todo lo alto se fueron con Paranoia, Quizás no sea nadie y Mentes bajando el telón a la brutalidad de uno de los mejores grupos de groove/death metal del país sin duda alguna. ¡Esperaremos con muchas ganas su próxima visita a la región!

Zoe Lilith

Casi acabando un festival lleno de sorpresas, emociones y gente impresionante, llegaban los chicos de La Skala de Richter con un concierto muy especial… Especialmente corto pero muy intenso, de esa forma que tienen los almerienses de llenar el sitio en el que tocan y La Skala de Richtercontagiarselo a todo el mundo como un virus, de transmitirnos cada palabra, cada sensación, cada nota… esa magia que liberan todos y cada uno de ellos.
Y no pudieron escoger mejor día para grabar su próximo videoclip y plasmar todo eso, que en la quinta edición del Aquelarre Metalrock Fest, con todos nosotros y por los que no pudieron estar.
Todos unidos por ellos, con ellos mejor dicho, frente a un escenario que se les queda realmente pequeño, participando en algo tan bonito como un videoclip en directo, para su último álbum Facta Non Verba cual pertenecían todas las canciones tocadas esa noche.
Empezando con Esclavo, seguida de La Duda single que abre el disco y que es una intro perfecta a lo que te espera si sigues escuchandolo.
Avanzaban con Equilibrio, Mis Demonios y Resurgir para acabar con su single debut El Monte de Venus para terminar de deleitarnos con esa brutalidad tan íntima y personal a la vez, que nos presentan con su metal operístico y sus letras para ponerte la piel de gallina de inico a fin en cualquiera de sus temas. Como siempre, un placer enorme ver a estos artistazos ir cada vez más alto, más lejos ¡y por que sigan así mucho más y hasta la próxima!

Zoe Lilith

Eran ya las 4 de la madrugada y tras el ciclón Vita Imana sólo quedaron los más fuertes y algunos cadáveres. Yo me puedo contar entre los segundos (sic)… Los malagueños Wonderonce no se merecían que los dejasen solos ante el peligro de una platea vacía y allí estuvimos para arroparles. Y es que me pareció una banda sublime, de esas bandas que merecen ser escuchadas por un público en plenitud, ante una audiencia más de teatro u ópera que lo que tenían delante, sin ánimo de menospreciar a nadie, por supuesto.
Wonder OnceDigo esto porque escucharles fue descubrir que no hace falta ponerse delante de unos Avantasia o de Epica para hacer una inmersión total en un mundo épico, de fantasía, donde encontré muy destacable la velocidad de ejecución en las notas del pequeño de ilustre nombre Germán de Sotomayor a la guitarra, junto con las bellísimas voces de Drakon y Liss (con una exuberante puesta en escena como la diva que es, que contrasta con la dulzura y simpatía que en todo momento mostró). Todo un recital de metal sinfónico con partes muy medievales y otras más oscuras acentuadas por la aportación de voces guturales a cargo de su baterista Andrea. Más discreta la figura de Nel, su bajista que sin embargo no desentonó para nada en la perfecta interpretación de los temas.
Recomiendo de veras una escucha con detalle de su álbum debut titulado Freedom Odyssey que nos muestra a una joven banda realizando un trabajo sobresaliente y con una calidad de sonido a la altura de los grandes nombres de este estilo a nivel internacional.

Y con esto terminamos el repaso a la más exitosa edición hasta el momento de un festival que empezó como algo muy underground y que se está convirtiendo en todo un referente ya no solo para las bandas que están buscando hacerse hueco en el panorama nacional sino también para otras más profesionales que año tras año engrandecen el festival y demuestran que haciendo las cosas bien, desde la humildad y con un trabajo honesto, la escena de metal en directo está mucho más viva de lo que generalmente tendemos a pensar los que amamos este estilo. Por último dar las gracias a Andy García, organizador del festival y su equipo, así como a la sala Garaje Beat Club por facilitaros en todo momento el trabajo y sobre todo por la calidad ofrecida en este evento.

Manu Hernández