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Noah Histeria está en plena forma. No sólo por haber grabado un álbum tan redondo como Hautefaye, sino porque están consiguiendo meter la cabeza en un montón de sitios: Resurrection Fest, Tótum Revolútum, final del concurso de bandas de El Vuelo del Fénix de Radio 3 (1), etc.

Hablamos de todo ello con Juan Giner, vocalista de la banda. Además nos habla de su próximo álbum, de la salud del progresivo en España y un montón de cosas interesante. Queremos agradecer enormemente a Juan el tiempo dedicado y su amabilidad sin fin.

Lleváis unos días de infarto, de hecho acabáis de grabar unos temas en El Vuelo del Fénix de Radio 3, todo un logro.

Sí, muy bien, veremos cómo queda todo. Tienen que hacer la mezcla del directo, había un montón de cámaras de RTVE, fue muy bonito, la verdad. Sólo íbamos a tocar 2 canciones, pero hicimos 2 muy largas y al final estuvimos casi 20 minutos tocando, casi medio concierto.

Fue un privilegio, además Juanma Sánchez es un tío genial. Nos trataron de maravilla, hubo muy buen rollo con todas las bandas, lo pasamos muy bien.

Se trataba de un concurso en el que habíais llegado a la final, ¿verdad?

Si, el resultado se sabrá el jueves. Hay 5 bandas finalistas, a todas ellas se les graba un vídeo, además de la entrevista que nos hicieron después del concierto. El ganador grabará 2 temas en el estudio de Alex Cappa, quien graba mucho metal en España. Nosotros queríamos meter la cabeza en Radio3 y ni nos lo pensamos.

Estáis metiendo la cabeza en muchos sitios.

Eso es lo que intentamos. Al final todo ha venido un poco de casualidad, te presentas a un concurso y al final sale bien. No habíamos apostado por la baza de Radio3 porque nunca nos lo hubiéramos imaginado, o porque no habíamos apretado las tuercas o visualizado qué persona nos podía ayudar. Pero mira, salió bien, a Juanma le encantó, nos dijo que estaríamos en contacto para cualquier cosa que surja.

El nivel de las otras bandas también era muy alto.

Muy muy bueno, de hecho había una de Murcia.

Sí, Lude, muy buenos, tocaron en el Rock Culture Fest.

Exactamente, nos gustaron mucho. Todas las bandas tuvieron muy buen nivel. Fue bastante variado, cada una tenía su estilo, eso me moló bastante, ninguna de las bandas se parecían entre ellas, y estaban todas en plena forma.

 

EL TÓTUM REVOLÚTUM TIENE UN CARTEL INCREÍBLE, PERO SUCEDE LO DE SIEMPRE: FALTA DE ASISTENCIA. VES QUE ALGO ESTÁ FALLANDO

 

Cuéntanos la experiencia vivida en el Tótum Revolútum, me parece unos de los mejores festivales a nivel nacional, con una firme apuesta por las bandas más talentosas del país, consiguiendo cada año un cartel increíble.

Todo lo que puedo decir del Tótum es bueno, pero me gustaría apuntar ciertas cosas. Tiene un cartel increíble, dentro de las bandas nacionales e incluso varias francesas (geográficamente les pilla más cerca que otras nacionales), han traído lo mejor de lo mejor.

Lo que sucede es lo de siempre: falta de asistencia. No fue mala, pero con el cartel tan bestia que había, ves que algo está fallando. Las cuentas cuestan mucho de cuadrar. Supongo que es una cuestión de tiempo, de ediciones. Supongo que a la gente le engancha más los grupos de renombre. En un festival suma mucho más de cara al público tener una o varias bandas que sean un gancho brutal, porque están de moda, o porque son buenos, o por lo que sea, que tener a 20 bandas muy muy buenas pero que por una u otra razón no conformen ese gran reclamo. Lo digo para la viabilidad del festival.

Estoy muy de acuerdo con la política del tipo de bandas que traen, son de una calidad a raudales, las que nosotros vimos allí son fuera de serie. Son bandas que están muy en forma, eso se nota como en el deporte, uno toca tal y como ensaya. Lo de Le Mur fue descomunal. Cosa que yo ya sabía, ya les había visto antes, pero creo que fue la banda que más sorprendió allí. Tocar bien, sobre todo en directo, va más allá de lo original o atrevida que sea tu propuesta, y ahí es cuando realmente se ve lo que vale una banda. Ellos tocan tan rectos, tan bien… son unos músicos brutales. Cuando les vi hace  años dije…»¿pero esto qué es?» Son músicos muy profesionales. La gente se queda con el carisma de su cantante, Elsa, yo me quedo con su forma de cantar. Lo suyo es superlativo. Hay gente que tiene un don, un talento, es una lástima que no se dedique profesionalmente a esto.

totum revolutum 2018

Crees que solamente es una cuestión de tener un nombre que enganche al público o hay algo más, ¿hay saturación de festivales?

En nuestro estilo un poco más progresivo o alternativo no, pero por supuesto que en España sí hay saturación de festivales de corte indie. Se le llama indie aunque se haya perdido toda la esencia del indie, no es nada nuevo. Se ha convertido en algo totalmente mainstream, es lo que mueve a la gente ahora. A veces la menor de las excusas es precisamente la música.

Lo que sucede en nuestro estilo es que hay muy pocas bandas que tengan una fuerza grande a nivel mediático. Hay bandas muy buenas que tienen un cierto nombre, como Syberia, Moonloop, Eric Baule, Quaoar, Obsidian Kingdom, o por supuesto Jardín de la Croix o Toundra, que al igual que Dry River juegan en otra liga. Pero quitando quizás esas 3 últimas bandas que he mencionado, o quizás alguna más, el resto por sí solas no tienen la fuerza mediática para llenar una sala. Cualquier festival que quiera atraer a mucho público, tendrá que llamar siempre a esas 3 bandas, que es lo que ha pasado un poco con el indie: todos los grandes festivales acaban llamando a Love of Lesbian, Vetusta Morla o Izal.

Mi objetivo es hacer de Noah Histeria una banda que esté de moda. La moda no tiene para mí en absoluto una connotación negativa. Creo que Dry River y Jardín de la Croix están de moda. Están de moda y son buenísimos. Es para alegrarse, y mucho. Nosotros estudiamos sus movimientos para ver cuál ese punto que les hace diferentes. Por supuesto que es la música, son bandas increíbles, pero también hay bandas increíbles por ahí que no han llegado a ese nivel, y hay que preguntarse el motivo. Hay mucho trabajo, una enorme planificación, hay gente detrás, no sólo son los miembros de la banda. Por ejemplo, la planificación de los vídeos de Dry River, todo perfectamente organizado para saber qué iban a sacar, cuándo lo iban a sacar, qué movimientos iban a hacer. Jardín de la Croix cuenta con todo el apoyo de Aloud, esas cosas marcan la diferencia. Sólo hasta que han llegado a Aloud ha sido cuando han despegado, y es porque hay gente que sabe mucho de esto. Había música, por supuesto, no se partía de cero, pero ha sido la lanzadera.

Puede ser una combinación de varias cosas, además de buscarlo, hay que encontrarse en el momento adecuado en el lugar adecuado.

Claro, y además no hay que obviar que tanto Dry River como Jardín de la Croix han despegado en su cuarto disco, con más de una década de trayectoria en ambos casos. Por eso yo soy muy respetuoso con las trayectorias de las bandas, con los años de experiencia y el músculo que han hecho. Nosotros tenemos un disco y un EP. No podemos pretender tener el mismo seguimiento mediático.

 

EL PROGRESIVO ESTÁ DE MODA: AL CONTRARIO QUE HACE UNA DÉCADA, DECIR QUE UNA BANDA TIENE TOQUES PROGRESIVOS ES ALGO CON CONNOTACIONES TOTALMENTE POSITIVAS

 

Está claro que esto es una carrera de fondo, pero aún con un solo LP, creo que Noah Histeria se ha puesto un poco de moda en un cierto círculo. ¿Puede que incluso el progresivo esté de moda? ¿Puede que se esté despertando el interés más allá del puñado de seguidores superfieles?

Sí, yo soy de la opinión de que el progresivo está de moda. en primer lugar porque, al contrario que hace una década, el calificativo de que una banda tiene toques progresivos es algo con connotaciones totalmente positivas hoy en día. Pero hace 10 años no era así. Entonces significaba que eras excesivamente barroco, que te andabas por las ramas, no ibas al grano…me aburrías.

Está de moda dentro del underground, no a nivel masivo. Eso tiene una serie de implicaciones: ¿cuánto público underground hay? Y el underground es por definición precisamente música minoritaria, con mucho menos público que la música mainstream. El indie se dio cuenta en un cierto momento y fue a buscar a ese público general, que consume música no como cultura, sino como un entretenimiento, lo cual es totalmente legítimo. La música underground siempre se ha dirigido a la gente que quiere consumir música a nivel cultural o intelectual, incluso de forma reivindicativa o de intentar superar ciertos límites o barreras intelectuales, de intentar buscar nuevas formas de expresión, de texturas, de sonidos. Somos muy pocos, pero aun así en festivales como el Resurrection Fest hay mucha gente.

Uno de nuestros objetivos, al igual que ha hecho Jardín de la Croix, es sobrepasar ese estigma de música progresiva, música instrumental o math rock. Jardín se coló en el Resurrection, en el Mad Cool, en el Primavera. Se fueron a Bristol, y les vio mucha gente, que igual no sabía ni lo que era el progresivo o el math, y ha flipado con ellos, porque son muy buenos. Han abierto la veda, y es ese camino por el que muchas otras bandas queremos ir. Queremos llegar al público underground general, no al netamente progresivo.

Yo soy optimista con la situación. Igual que Noah se ha colado en el Resu, yo alucino cuando veo a gente como Dûrga (por poner sólo un ejemplo) en un festival en Benidorm con un público que para nada consume ese tipo de música, y estoy convencidísimo de que habrá varios cientos de personas que saldrán muy sorprendidos con su música.

Y Toundra fueron al Arenal Sound y al Primavera; y habrá gente que flipará con estas bandas. Pero la música es cíclica, y al progresivo le quedan 4 años de estar de moda. 5, no más. Y creo que no dará tiempo a llegar a más gente. Pero no es una cuestión de pesimismo. Si echas la vista atrás, y ves hasta donde llegó…Tenemos que ser conscientes de que vivimos en España, que es un país con un background, al menos en este estilo musical, más bien bajo respecto a los países de referencia como Estados Unidos, los países nórdicos, británicos, Francia, Alemania, Italia…También es lo que tiene compararse con lo mejor. Bandas como Toundra o Jardín de la Croix están intentando consolidarse en Inglaterra, Alemania, puede que ellos sí tengan más mercado por ahí.

Las bandas que cantamos en castellano y que apostamos por ello en su momento, en nuestro caso simplemente por una afinidad cultural, por estar a gusto con lo que estás cantando, es muy difícil que lleguemos a un público que no sea hispanohablante. Aunque mira a Berri Txarrak con el vasco, tampoco se sabe nunca. Algún día intentaremos ir a la conquista del mercado latinoamericano.

También recuerdo haber leído precisamente en una crítica de vuestro disco Hautefaye que el castellano era el idioma más bonito para hacer la música que hacéis vosotros.

Está un poco de moda, eso es verdad. Muchas bandas de nuestro rollo meten frasecillas en castellano.

 

PROPUESTAS COMO LA DE ATAVISMO, EXQUIRLA O ERIC BAULE REIVINDICAN EL VALOR DE LA VERDAD EN LOS DISCOS. ESOS 3 ÁLBUMES HAN HECHO SUBIR EL NIVEL DEL PROGRESIVO EN ESPAÑA

noah histeria

Entonces, por tus palabras, la asignatura pendiente del progresivo es buscar la forma de llegar al público general. Porque la calidad ya la tiene, creo que estamos viviendo unos años de una calidad indiscutible.

La calidad de lo que se hace en España es brutal. Evidentemente, en países con más tradición la calidad es todavía mayor. Pero de donde veníamos a donde estamos, la velocidad con la que se ha evolucionado, y sobre todo lo variado de las propuestas deja un nivel altísimo. Como ejemplo, la aparición fulgurante de una banda como Exquirla, que era el nexo de unión que faltaba entre Triana y el punto actual al que hemos llegado. Una de las cosas que más me gustan de las bandas es cuando fusionan sus influencias, casi siempre del mundo anglosajón, con su propia cultura, con su folclore. Y eso Exquirla lo consiguió. Igual que Opeth son enormes, no por hacer death metal, sino por fusionar el folclore nórdico con el death metal, consiguiendo un sonido absolutamente. Exquirla ha sido un puntal para el progresivo en España, el hecho de no renunciar a sus raíces y poder fusionar esos dejes flamencos con una música de carácter post, instrumental… Ese disco fue para mí el disco del año pasado en España. Maravilloso.

Exquirla ha abierto un camino por el que nadie había transitado, eso tiene un mérito terrible.

Sí, y bandas como Atavismo, que también juegan con esas raíces. A mí me chifla cuando hacen algo así, y con esa verdad por delante. Hay discos que pueden ser muy buenos técnicamente. Vivimos en la era de la técnica, ciertas propuestas que nos llegan de Inglaterra, Francia, Estados Unidos, parecen más deporte de competición que música. Esas cosas están muy bien, pero hay discos que no te los crees. Parecen cine de efectos especiales. Propuestas como la Atavismo o Exquirla, o la de Eric Baule en 2015, reivindican el valor de la verdad en los discos. Cuesta mucho contar algo de verdad, es decir, no intentar gustar, sino acabar refugiándote en lo que realmente crees. Para mí esos 3 discos han marcado una época, son los que han hecho subir el nivel del progresivo en España.

Pero igual es causa y efecto. Comparto tu opinión sobre la calidad de estos 3 discos, compuestos desde dentro y hacia dentro, pero también acabamos de decir que hay que buscar otro tipo de público. Igual ambas cosas son incompatibles por definición.

Pues sí, no creo que estos 3 discos vayan a llegar a mucha gente, pero a mí me han marcado. Supongo que eso es lo más grande que puedes recibir de una persona. Y otros más, por supuesto, y no sólo en el progresivo. Fusionar cosas nuevas con el folclore es algo que me flipa. Por ejemplo Fuel Fandango introduce el arte flamenco fusionado con electrónica, rockabilly, etc. Cuando te atreves, fusionas y te sale tan bien la jugada, con canciones tan redondas…son unos fuera de serie.

 

…continúa…

 

(1) Actualización de última hora: Frequency ha sido la ganadora del concurso de bandas de El Vuelo del Fénix de Radio 3. El segundo puesto ha sido para los murcianos Lude. Desde aquí queremos dar la enhorabuena a los ganadores y a todos los participantes.