1991 fue un año en el que se publicaron discos muy especiales en casi todos los estilos musicales y particularmente en los que engloba el Rock. Algunos de ellos marcaron una época, otros comenzaron una trayectoria y también los hubo que supusieron el fin de otra. «30 años de…» es nuestra manera de rendir homenaje a esas obras musicales compartiendo con nuestros lectores y lectoras la huella que han dejado en nuestro equipo de redacción. Y ya de paso, recordar tiempos en los que la música que nos mueve a formar parte de esto ocupaba el lugar que se merece.
Un ejercicio de nostalgia, reconocimiento y celebración. Y para ti que nos lees, ¿qué supuso ese disco en tu vida?
Hoy se cumplen 30 años del lanzamiento de Gothic de Paradise Lost, segundo disco de la banda británica. Aunque por aquel entonces era considerada una formación underground y su relativo éxito vino con sus discos posteriores, es en este trabajo donde por primera vez se combinaron las guitarras eléctricas con elementos orquestales, voces femeninas y solos, dando origen a un subgénero: el Metal Gótico. Varios redactores de esta casa nos hablan sobre el disco contestando a las siguientes cuestiones:
¿Cuándo escuchaste el disco por primera vez?
Borja Quiles:
Tendría unos 16 años, hace unos tres o cuatro años. Por aquel entonces empezaba a interesarme por el metal extremo, pero nunca había investigado sobre esta forma de hacer doom. El Gothic fue la puerta por la que descubrí otros clásicos como As The Flowers Withers o The Angel and The Dark River de My Dying Bride.
Carina R.S.: Creo que cuando tenía 17 años aproximadamente. Fue justo esa época en la que me empecé a interesar por sonidos algo más oscuros que los del metal que escuchaba por aquel entonces. Recuerdo que fue un amigo el que me enseñó este disco, aunque yo ya conocía a los Paradise Lost con anterioridad, pero este álbum en concreto, cuando me lo hizo escuchar este colega, me pareció alucinante.
Manu Hernández: Allá por el año 2003, aunque mi historia con Paradise Lost es curiosa.
Zoe Lilith: Creo que fue con 20 años, cuando descubrí a la banda.
¿Qué te aportó o qué te inspiró el disco?
Borja Quiles:
Me mostró una original forma de hacer metal que yo no conocía. Esos tempos lentos, los riffs tocados en tonalidades agudas y las partes orquestales me cautivaron desde la primera escucha y lo siguen haciendo a día de hoy.
Carina R.S.: Como he dicho anteriormente, lo descubrí por aquella época en la que empezaron a llamarme la atención derroteros musicales algo más oscuros. Este disco afianzó mi gusto por los sonidos más siniestros, y ayudó a que siguiera investigando todo tipo de grupos y subgéneros un poquito menos conocidos.
Manu Hernández: Nunca he sido un fan estudioso del Metal Gótico y este disco lo escuché de pasada buscando las mejores canciones para hacerme mi “The Best Of” personal de Paradise Lost. Por tanto me aportó perspectiva para conocer esa etapa inicial de la banda.
Zoe Lilith: Me gustó mucho, para mí el álbum me vino genial en momentos duros de esa época.
¿Fue tu primer disco del artista? Si no, ¿cuál?
Borja Quiles:
No. El primero fue el Medusa, de 2017. Conocí a la banda a raíz de las noticias que surgían sobre este disco al poco de salir al mercado. Medusa me gustó y decidí indagar sobre los inicios de la banda. Primero vino el Lost Paradise de 1990 y, después, este Gothic.
Carina R.S.: Ya había escuchado otras cositas de los Paradise, pero realmente fue en este disco donde me quedó muy patente ese estilo de sonidos cambiantes muy de la casa Paradise Lost. Es un grupo que no ha tenido miedo de experimentar y cambiar de rumbo en cada disco, sirviendo de referencia para muchos grupos que surgirían más adelante.
Manu Hernández: Aquí es donde tengo que contar mi historia con Paradise Lost. Allá por el año 1999, con la irrupción de los finlandeses HIM en la escena de Metal comercial europeo, un colega me dijo que si me gustaban había otra banda más veterana que hacía algo parecido, y que si encima me gustaba Depeche Mode me iban a molar mucho (risas). Me pasó el One Second, el Draconian Times y el Icon, y ahí me quedé. Esos 3 discos los estuve escuchando durante una época y luego quedaron en el olvido. Fue en 2002 cuando empecé a escuchar más Metal Extremo, adentrándome en el Melodeath y todo lo que hubiera relacionado. De esta manera, recuperando el interés por Paradise Lost descubrí este disco, el Gothic.
Zoe Lilith: Creo que mi primer disco de Paradise Lost fue el The Anatomy of Melancholy, un disco que me encanta, es de mis favoritos.
¿Crees que es el mejor disco de su carrera? Si no, ¿cuál?
Borja Quiles:
Yo lo pondría junto a Lost Paradise como los dos mejores. Me gustan otros clásicos de la banda, como Icon y Draconian Times, pero creo que no están al nivel de esos inicios más extremos. El impacto y la influencia de ese estilo que unía a la perfección el death metal con el doom y las influencias góticas también fue mucho mayor. Pero Paradise Lost ha sido una banda tan cambiante y que ha explorado sonidos y estilos tan dispares que es difícil establecer qué discos son mejores o peores.
Carina R.S.: Como decía, considero que tienen discos tan variados y diversos que no sabría decir si es el mejor de su carrera o no. Creo que sí que fue el que más influencia ha dejado en el metal actual ya que un sinnúmero de grupos que surgirían posteriormente tienen como claro referente a Paradise Lost y a este discazo.
Curioso este vídeo que analiza en un tono algo sarcástico su carrera discográfica:
Manu Hernández: No, en mi caso no llegó a enamorarme porque en la época que lo escuché mi gusto y conocimiento del Metal Extremo estaba muy verde (y el Doom no sabía ni que existía más allá del nombre de un videojuego), así que lo escuché de refilón buscando esas mejores canciones para hacerme un recopilatorio de la carrera, tan variada por cierto, de esta banda que es auténticamente de culto. Yo me quedo sin duda con el One Second y el Draconian Times, que es donde explotaron más esa parte Industrial y Metal mainstream por la que llegué a conocerlos.
Zoe Lilith: Si hablamos de Paradise Lost hablamos de una banda muy importante dentro del movimiento doom y sin duda tienen varios discos que son obras maestras, para mí los tres mejores discos son The Anatomy of Melancholy, Tragic Idol y Symphony For The Lost.
¿Cuál es tu canción favorita del disco?
Borja Quiles:
Me quedo con Shattered. La voz de Nick Holmes, más grave y profunda que en los otros temas, le da un ambiente muy oscuro y tétrico. Pero lo que más destaca son los geniales riffs de Gregor Mackintosh. En la parte de los armónicos la guitarra suena afilada como un cuchillo. También me encantan las melodías de Angel Tears y el tema homónimo, Gothic, con esa parte final tan orquestal y los coros de Sarah Marrion.
Carina R.S.: Aunque sea un poco cliché, una de mis canciones favoritas es Gothic, la que abre el disco, ya que para mí supuso un gran impacto y significó muchísimo en aquel entonces en el que me encontraba en plena búsqueda de sonidos más siniestros y agresivos. Aunque Shattered también me encanta y también la considero de las más interesantes.
Manu Hernández: Shattered es la más cercana a los Paradise Lost que más me gustan, por el timbre de voz de Holmes casi aislado en el disco pues mayormente usa guturales, y el guitarreo, aunque lejos de la producción y estilo de mis discos favoritos de la banda. Eternal es más bestia pero también de mis favoritas en el disco.
Zoe Lilith: Me quedo con Dead Emotion, Silent y Desolate, personalmente no me puedo decidir entre ninguna, son canciones que me llegan muchísimo.
¿Qué importancia crees que tiene tanto en su contexto generacional como en la influencia que tuvo después?
Borja Quiles: Gothic
fue una pieza clave del movimiento del doom metal de los años 90. Junto a sus compatriotas My Dying Bride y Anathema definieron muy bien ese sonido denso del que tantísimos grupos han bebido. Además, este disco fue precursor del uso de voces femeninas limpias dentro del metal extremo.
Carina R.S.: Para mí fue un disco icónico tanto en el momento en el que fue publicado como en la actualidad ya que fue fundamental en la evolución del metal hasta nuestros días. Fueron de los primeros en incorporar voces femeninas operísticas a los sonidos oscuros y agresivos y en mezclar sonidos Death con influencias del rock gótico y ese legado ha quedado muy patente en grupos y subgéneros que surgirían a posteriori como por ejemplo el Gothic Metal o el metal sinfónico.
Manu Hernández: La importancia es indudable y de sobras conocida en el mundo del Metal moderno. Esa combinación de distorsión, voces guturales, sonido denso y la inclusión de voces femeninas de corte más lírico forjó un nuevo estilo que luego vería su desarrollo por ellos mismos y otras bandas fundamentales del Metal Gótico y Sinfónico.
Zoe Lilith: Claramente son uno de los grandes referentes del doom y en los 90 pegaron muy fuerte junto a bandas como My Dying Bride. Siendo fieles al sonido tan potente y pesado y las letras desoladoras y depresivas del doom, a lo que te transmiten esos ritmos. Le dieron al estilo voz y notoriedad.
¿Crees que en el siglo XXI se ha publicado algún disco con alguna similitud o relación?
Borja Quiles:
No soy muy amante, por lo general, del metal gótico. Pero sí que encuentro algunas reminiscencias en los discos de November’s Doom, una banda estadounidense muy recomendable, o, por irnos a algo más reciente, en Under a Godless Veil, el último trabajo de Draconian.
Carina R.S.: Como comentaba anteriormente, han surgido infinidad de grupos a los que les ha influenciado este disco en gran medida. Se pueden ver claras referencias en grupos como Katatonia, o incluso en grupos de tintes más sinfónicos como Tristania en sus inicios. Por supuesto influenciaron a grupos de Doom Metal y Doom/Death que han ido surgiendo a posteriori. Por ejemplo, veo reminiscencias de Paradise en la música de Swallow the Sun o de Shape of Despair. Han dejado huella en muchísimas bandas que comenzaron a tocar mucho después de Paradise, y además han sabido evolucionar y cambiar con los tiempos. Incluso hoy en día siguen innovando con cada trabajo que publican.
Manu Hernández: Creo que Paradise Lost es una grandísima banda de culto pero su sonido no me ha parecido nunca absolutamente único e inimitable, seguramente por los cambios de estilo que han tenido a lo largo de su carrera. Tras ellos han surgido bastantes bandas que combinen voces guturales con femeninas (en mayor o menor medida), sonidos densos y melancólicos a la vez que extremos. No sé, pero no recuerdo ninguna banda o disco más actual que pueda relacionarlo en este caso, aunque sí considero cierto «parentesco» con bandas coetáneas como Tristania, Amorphis o Katatonia que también han tenido similares grados de experimentación en su estilo.
Zoe Lilith: Obviamente han influenciado a las bandas de doom metal que han venido detrás, buscando puedes encontrar bandas muy buenas más actuales que les tomaron de referencia tanto en el sonido de ese disco como en los que sacaron después.