Crónica | La Excavadora en la Sala Monkey Rock
El pasado 25 de octubre se volvía a arrancar La Excavadora en Madrid después de algo más de año y medio sin pasar por la zona. El lugar elegido fue la pequeña sala Monkey Rock de San Sebastián de los Reyes, un oasis de rock en un lugar de predominancia reguetonera. Hacia allí nos dirigimos desde Rock Culture.
La banda vasca llegaba con un par de bajas en la formación, la conocida desde mayo de Mikel Azpiroz “Buton” al bajo y la de Alain a la batería, siendo sustituidos por Jorge Gascón y Pablo Bahillo respectivamente. El resto de la banda, y como es habitual, Joel a la guitarra y coros, Raúl Lasa “Txiki” a la guitarra y a la voz, Iñaki Urbizu “Pela”. Lo de Pela, es algo a parte, es un frontman con mayúsculas, se come el escenario y le es indiferente que sea un festival de miles de personas, o un íntimo concierto, como fue el caso de este último. Siempre me he preguntado de dónde saca el tiempo para estar con La Excavadora, Víctimas Club y con Marky Ramone si a mí no me da la vida para trabajar, sacar fotos y recoger la casa.
Con algo de retraso comenzaba el concierto. La banda aprovechó la primera canción para darnos a conocer su último single, el enérgico ¿Quién Manda Aquí?. A partir de este momento y como es habitual, una mezcla de sus dos álbumes de estudio La Excavadora (2021) y Todo Es Para Destruir (2023), eso sí, siempre apoyados por el entusiasta público que acudió a la cita y cantaba todas las canciones.
El segundo tema fue la canalla -y una de mis canciones preferidas- Mi Novia y Yo Odiamos a la Humanidad. A partir de este momento, y ya sin vuelta atrás, éxtasis de punk-rock alentado por las guitarras enérgicas de Txiki y Joel y dirigido por Pela desde el pequeño escenario de la sala. Es gracioso ver a una persona que no para encima de las tablas en un escenario pequeño, parecía sujeto a él, de hecho, se tuvo que bajar en un par de ocasiones para cantar con el público. Entre chascarrillos varios de Pela, incluída su disertación sobre el nombre del lugar, San Sebastián “De los Reyes”, fueron pasando los temas, Kímika, Mi Carrera Delictiva, Contra El Suelo, Grasa en el Taller, Mala Música… hasta llegar al momento del bis, que no fue uno al uso, sino que se hizo de corrido. Los temas elegidos fueron Aún Queda Un Sitio A Donde Huir, la versión de Gatillazo Exclavos del Siglo XXI, la rápida y rockera Habrá Pelea y para finalizar uno de los éxitos de la banda, Futuro, que suena increíble en directo. Con ello pusieron el punto final y marcharon “a descansar” ya que tenían carretera que tomar al día siguiente hacia el almeriense Albox para participar en el Rock Albox Fest.
Si algo indica para el público que un concierto ha sido bueno, es la sensación de la duración. Basándome en esto, el concierto fue brutal, se hizo cortísimo, entretenido y se disfrutó de una banda singular en sonido y por supuesto, en las letras. Además no se notaron las bajas de la formación y Jorge y Pablo suplieron a la perfección a los ausentes Buton y Alain. La Excavadora convenció a los incondicionales que se habían dado cita en la sala sansebastianense y que mostraron el deseo de no tener que esperar tanto tiempo hasta la próxima visita de la banda.
Por último, una mención para la sala Monkey Rock, una sala pequeña que respira rock por los cuatro costados, y en especial a Juan Manuel, no sólo por el trato que nos dió (de diez), sino por su esfuerzo por acercar los diferentes estilos de rock a un lugar poco dado al género como es San Sebastián de los Reyes. Seguro que volveremos por allí a reseñar algún otro concierto.