Katatonia – Sky Void of Stars
Ya podemos disfrutar del nuevo trabajo de Katatonia, publicado el 20 de Enero.
Sky Void of Stars, nos presentan un sonido puramente Katatonia, fieles a su estilo, navegando entre diversos géneros diferentes siempre unificados con sutileza y mimo.
Este álbum representa a la perfección su sonido marca de la casa, donde podemos apreciar tintes doom, death e incluso post-metal y post-rock, desafiando siempre los cánones de cualquier género; aunque en esta ocasión, parecen haberse alejado un poco de cadencias algo más progresivas que pudieron apreciarse en sus últimos trabajos. Sin embargo saben mantener como siempre su creatividad y carácter intactos.
Las atmósferas, cambiantes y melancólicas, rebosan melodías oscuras y guitarras desgarradas, recuperando trazos de esa fórmula utilizada años atrás con anteriores trabajos, que consiguió posicionarles como rareza y a su vez como referente en el género.
Las melodías cadentes adquieren protagonismo indiscutible en detrimento quizá del exceso de experimentación, más patente, como he dicho, en álbumes anteriores, aunque siguen siendo fieles a añadir ese retazo progresivo que los hace tan genuinos y únicos.
Es inevitable escuchar este álbum sin volver la vista atrás hacia otros de sus trabajos como Viva Emptiness, The Great Cold Distance o incluso Dead End Kings, pero desde luego el sonido presentado aquí es fresco, nuevo y a su vez con esa singularidad tan característica que hace que se te queden los temas grabados en el recuerdo. Una amalgama de los sonidos desarrollados durante toda su carrera pero a su vez, renovados, originales y sin repetirse, lo cual será muy valorado por todos los fans de la banda, que ha sabido reinventarse con este álbum para continuar posicionándose en el lugar que les corresponde.
Con Austerity, hacen gala de esa brillantez compositiva tan característica suya, enganchándonos al álbum casi de inmediato. Colossal Shade nos regala ese halo oscuro más opresivo que nos sume en su manto gélido para, a mitad del tema, elevarnos en su estribillo dramático y agridulce.
Temas como Opaline nos dan ese atisbo de sonidos más modernos y renovados que demuestran que no le temen a la reinvención ni tampoco a seguir siendo fieles a sus sonidos originales, muestra más que patente de que saben reinventarse sin abandonar su esencia.
Birds nos recuerda con las melodías que emanan de sus guitarras, que saben cómo romper los cánones del género una vez más, quedando tatuada en nuestra mente.
En sus temas más pausados y lentos como Drab Moon, nos transmiten un sonido decadente y atmosférico, que nos guía por ese camino nocturno y nos hace deslizarnos por esa espiral, sin darnos casi cuenta de nuestra caída.
Para mí, una de mis favoritas, es Author: guitarras, bajo y batería hacen el combo perfecto para la creación de esa atmósfera oscura y vaporosa capitaneada por la preciosa voz de Jonas Renkse. De nuevo las características letras crípticas, en las que se pueden leer mensajes de oscuridad, melancolía y pesadumbre, se alían a la perfección con la agresividad de los instrumentos.
En la bella Impermanence, la tristeza es compartida en esta ocasión con Joel Ekelöf de SOEN, que a modo de colaboración, presta su voz para este imponente y desgarrador tema.
Sclera prosigue con esa estela lóbrega en la que el tándem liderado por Jonas Renkse y Anders Nyström (completado por Niklas Sandin al bajo, Daniel Moilanen a la batería y Roger Öjersson en las guitarras), parece profundizar cada vez más en esa espiral de negrura y frialdad.
Atrium se presenta como otra de las grandes favoritas, tema que se nos quedará grabado y que no podremos olvidar fácilmente. Tal y como reza la letra, este disco parece ascender a través de la oscuridad como un canto a la noche:
We sing to the night
Abolishing the promise
Our constellation is so far from reach
I’m fading from your sky
The shutdown is complete
You turned away despite my loving
No Beacon to Illuminate Our Fall
parece llevarnos lentamente hacia un cada vez más desesperanzado final del camino para dar carpetazo con Absconder, presentado como Bonus Track, en el que se cierra el oscuro círculo.
Un nuevo capítulo en la carrera de la banda que nos ofrece en esta ocasión renovación y fidelidad a su sonido a partes iguales, en los que la oscuridad es incluso más fuerte y palpable que en álbumes anteriores. No defraudará.