El pasado 19 de enero los cordobeses Viva Belgrado publicaban por fin su cuarto trabajo, Cancionero de los cielos, un disco que ha generado una expectación y una curiosidad que quizás no se espera tanto con el lanzamiento de un nuevo trabajo de una banda independiente, aunque al tratarse Viva Belgrado de una banda muy bien establecida en unos estilos musicales como son el Screamo y el Post Hardcore, con un sonido muy personal y absorbente, ha llamado mucha la atención con los adelantos tan diferentes de un disco que han editado con su propio sello, Fueled by Salmorejo en los estudios La Mina de Sevilla y que antes de escuchar completo genera algunas dudas de si será una digna continuación de Bellavista.

Aunque es cierto que con la salida de los singles previa al lanzamiento del disco, Cancionero de los cielos generó algo de confusión por lo distintos que eran los temas entre si y más aún si cabe por la elección de Elena observando la Osa Mayor, una canción sin guitarras, como el primer adelanto, con la escucha del disco al completo queda claro que se trata de un trabajo con mucha cohesión y sentido a la altura de sus discos anteriores.

Al ponernos frente a este Cancionero de los cielos nos encontramos con un disco valiente y honesto en el que Cándido Gálvez y los suyos nos hablan de sus experiencias y pensamientos que reflejan en 12 canciones influenciadas por distintos estilos musicales como son el Indie, el hip hop, el punk y el pop y entre las que destacan canciones con muchos sintetizadores, distorsión, canciones con dos baterías y hasta canciones sin guitarras, porque si esperabas monotonía en un disco de Viva Belgrado, te estas equivocando de sitio.

Cómo ya hemos comentado anteriormente, entre esas 12 canciones que componen el disco podemos encontrar canciones que siguen la línea de los discos anteriores como Chejov y las gaviotas que podría ser perfectamente un clásico de Viva Belgrado con los riffs de bajo y las baterías apoyándose entre si, Gemini, Saturno devorando a su hijo o Perfect Blue que están en la misma línea. También encontramos canciones en las que exploran dentro del estilo pero pisando tierra firme como podrían ser Ranchera de la mina que personalmente es una de mis favoritas del disco, Vernissage o Un tragaluz.

Y aunque juntando estas con otras canciones muy diferentes como Elena observando la Osa Mayor, Jupiter and beyond the infinite donde colabora el trapero Erik Urano, Nana de la luna pena en la que se une Sara Zozaya o El cristo de los faroles que se sostiene sobre un ritmo latino, podríamos pensar que se trata de un disco sin mucho sentido, las referencias al cielo como hilo conductor, las letras especialmente trabajadas, los contrastes entre gritos y susurros y las distorsiones y los momentos de calma y todo lo que precede a este trabajo, hacen que este Cancionero de los cielos acabe siendo un disco que supone un paso adelante en la carrera de Viva Belgrado con el que consiguen salir de todo tipo de catalogaciones y seguir dándole forma al estilo único que tanto les caracteriza.

La presentación del disco será el día 2 de febrero en la Sala La Paqui de Madrid con los locales Boneflower de la mano de Inverfest y las entradas pueden adquirirse aquí. Desde Rock Culture os recomendamos no perdéroslo.