Crónica: Resurrection Fest 2023 – Jueves

Extrañamente con más energía que el primer día teníamos ganas de ver que nos tenía preparado la segunda jornada del festival ya que había muchas bandas que despertaban nuestra curiosidad.

La que fue para muchos una de las grandes sorpresas del festival fueron los franceses Landmvrks, su sonido arrollador y su naturalidad en el escenario fueron perfectos desde el inicio que arrancaron con Lost In a Wave, el que puede que sea su tema más conocido. Su sonido está muy nutrido de diferentes géneros y los saben aprovechar de forma sublime, canciones como Visage son prueba de ello. El escenario grande les sentó como anillo al dedo, estoy deseando tener más oportunidades de verlos en directo. El mejor momento fue cuando pudimos gozar de la canción Self Made Black Hole junto al vocalista de Resolve que tocarían a última hora. Su propuesta intenta escapar del metalcore más manido y por lo menos ofrecer algo distinto en un género tan dilapidado.

Imperial Triunphant fue otro de esos descubrimientos de última hora gracias al festival, su estética aunque simple atrae al instante. Toda la banda transmite una extraña sensación de serenidad que hasta resulta hipnótica. En cuanto a su música más que simple es una amalgama de fusión donde tenemos desde influencias black hasta jazz. Es para todo el mundo? no, ni creo que lo pretendan pero saben defender a la perfección su propuesta y si te atreves a entrar en lo que ofrecen descubrirás una banda muy interesante , un sonido muy rico y con mucho que ofrecer.

Elegant Weapons nos brindaron la oportunidad de escuchar elementos del metal más clásico que aunque no es para todos los paladares hará las delicias de los fans más clásicos. Aunque todo hay que decirlo el sonido fue impecable en todo momento. Está claro que la gran mayoría del público estaba allí más por el nombre detrás de sus miembros que por su disco, eso no quita que no dieran un directo totalmente disfrutable. Le pusieron la guinda al pastel tocando un cover de War Pigs para el cierre.

Lo de Butcher Babies en el ritual fue un desfase, para lo hora que era amasaban una cantidad de público nada despreciable y la gente iba gozando cada tema que lanzaban. Su propuesta musical funciona y encaja, eso está claro y todo capitaneado por las vocalistas Heidi Shepherd y Carla Harvey que mueven al público con una facilidad pasmosa. Pero es que ellas mismas derrochan energía por los poros y non da sensación de que les cueste un pelo. Hasta los resukids tuvieron el placer de disfrutar de su show.

Alter Bridge es de esos grupos que nunca han llegado a estar en mi top pero siempre han estado muy presentes en mi vida debido a mis amigos, lo único que puedo decir que no se sepa ya de una banda tan mítica es que el directo les sienta demasiado bien. El sonido era una bomba, cada vez que su batería Scott Phillips aporreaba el bombo podía sentir la potencia del golpe, aunque ningún miembro de la banda se quedó atrás. La voz de Myles es toda una delicia y lució especialmente bien cuando nos lanzaron la mítica Blackbird, no se cuanto más podremos disfrutar de el debido a sus problemas de oído pero esperemos que aún sea mucho porque están en un momento estupendo.

Powerwolf fue increíble y me quedo corto, para que mentir, no me esperaba gran cosa pero me dejaron con la boca abierta. Su sonido fue impecable y arrollador, su producción poco tiene que envidiarle a la Ghost y todo respaldado por unos grandísimos músicos. Mucha gente no se los tomará en serio por su temática pero es que ellos mismos son los primeros que no se toman en serio y están riéndose durante todo el concierto y ver un grupo disfrutar así es contagioso. El momento más loco de la noche fue la introducción de la canción Resurrection By Erection que bueno, podría decirse que estaban en el festival apropiado para ella, la cual dio su cantante Attila Dorn en un perfecto castellano. Aunque todo el setlist fue una delicia de temazos como We Drink Your Blood o Incese & Iron. Estoy seguro que muchos se acercaron  curiosear y se marcharon siendo acérrimos seguidores.

Lacuna Coil fue un abuso, de los mejores conciertos del festival, una pena que no lo diesen sobre el main. La energía que derrochaban y el sonido tan espectacular hacen que ahora en casa escucharlos me sepan a poco. Hubo espacio para sus temas míticos y para lo nuevo, temas a los que el directo les sentó de perlas sobre todo a Never Down que vio la luz hace apenas unas semanas. Toda la banda sonó de lujo pero lo de Cristina Scabbia fue de otro nivel, en todas las canciones rompía con su chorro de voz. Tuvimos otro gran momento cuando tocaron el cover de Enjoy The Silence. Ojalá tenerlos pronto de vuelta pque con directos así todo sabe a poco.

Con respecto a Pantera, tengo sentimientos encontrados, desde que anunciaron esta especie de regreso no pude evitar levantar una ceja. No podemos ignorar que el mismísimo Vinnie estaba en contra de revivir la banda sin su hermano. Pero aquí estamos, presenciando a una especie de Pantera monetizando la imagen de los hermanos Abbott como si fuera una reunión totalmente legítima. No pasa nada, hace tiempo asimilé que esta banda no correspondía a mi generación, por mucho que me duela. Esto es una prórroga, pero no puedo evitar pensar cuánto queda de aquella banda que revolucionó el metal tal y como lo conocemos.

Hubo grandes momentos, cuando tocaron I’m Broken, 5 Minutes Alone o Fucking Hostile entre otras las grité a pleno pulmón junto al mar de personas del masivo público que me rodeaba. Sin embargo, aún no entiendo por qué lanzaron la intro acústica de Cemetery Gates con imágenes de los hermanos Abbott, solo para cortar abruptamente cuando rompe el tema y tocar el cover de Planet Caravan. Fue un jarro de agua fría que aún me cuesta asimilar. Entiendo que Phil Anselmo ya no se encuentre en el nivel vocal de cuando grabaron la canción pero para eso habría sido no mejor hacer el amago. El otro fallo de la noche fue el cierre de Cowboys From Hell con Zack Wylde interpretando el solo de forma bastante pobre.

Por un lado, claro que emociona escuchar en vivo canciones tan legendarias, pero fue un directo con ese punto agridulce. La mayoría de las personas disfrutaron de las canciones, pero queda la pregunta de cuánto se les justifica por abanderar el nombre de Pantera. No sé si hay alguna conclusión sobre todo esto. A veces, solo tenemos experiencias de las que aprender, y creo que este concierto ha sido una de esas ocasiones.

Para terminar teníamos en el ritual a Resolve que aguantaron perfectamente el tipo. Diría que ellos fueron los primeros sorprendidos en congregar a tantas personas, quizá esto fue lo que les hizo dar un directo con tantísima energía. A pesar de que las piernas ya pesaban la gente se entregó y tuvimos varios circle pits, cerrar un día nunca es fácil pero pasaron el examen con sobresaliente.