Hay semanas intensas de trabajo que deseas terminar con cierta calma y paz mental, disfrutar de un buen concierto sin llegar a saturar de distorsiones. Y así fue como llegué el pasado viernes al concierto de presentación de lo nuevo de Luback.
El lugar elegido el Café Berlín de Madrid, que hubo un tiempo que se llamó We Rock y parecía ser la esperanza en la escena, pero actualmente se está ganando el prestigio de convertirse en uno de los templos del blues de la capital.
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Para quien aún no conozca a Luback, hablamos de un quinteto a caballo entre el country, el blues y algunos aires de AOR con un sonido que te transporta a la América profunda de Nashville.
Salieron puntuales como un reloj al ritmo de Heat Flames and Fire uno de sus temas más representativos, perfecta combinación de energía, elegancia y buen feeling.
Siguieron temas como Light state of Mind y Guilty or not con los que fueron aclimatando el ambiente y calentando el escenario, la precisa maquinaria de las guitarras de Marcus, con las voces de Cristian empezaban a vislumbrar el potencial que estaba por venir.
Madrid por estas fechas se convierte en un árido espacio así que, tras rehidratar con cerveza fue el turno de Tale of the Gang cuyo ritmo refrescante mezclando percusiones de Yago con las guitarras de Marcus y las líneas de bajo de Manuel son una delicia.
Da gusto apreciar una complicidad en las guitarras como las que se entremezclan en Fighting star, sin necesidad de virtuosismo se puede hacer una perfecta combinación de talento y estilo.
Real love es una de esas canciones nuevas que van a presentar y donde la batería y el riff hipnótico dan paso a un toque hard rock.
Cristian nos fue comentando que los nuevos temas irán saliendo a lo largo del año aprovechando para presentar Wherever I am otro corte más suave y limpio.
Un ambiente de teclados y Slide oscuro marcaba el inicio de Outcast, donde el sonido del sur impregna cada arreglo.
Siguieron sonando otros temas, de nuevo un riff acústico de puro sentimiento country nos adentraba en Pioneers un tema que habla del espíritu de aventura, donde Manuel dejo de tocar el bajo para centrarse en acompañar al violín
Hubo tiempo para ponerse más románticos con Shaped by you con armónica rollo Dylan para que, casi sin parar llegó el turno de White Horse.
De pronto Cristian pidió quitar volumen a su guitarra, con lo que se arrancó a cantar My Ghost a pulmón sin electrificar, el momento fue el inicio de un tema cuya evolución dio paso a un pasaje más oscuro, lleno de emoción, con gran presencia del teclado y solo con wah-wah.
Casi al final del show llegó el momento del esperado Different trees sacado el viernes pasado que habla de la necesidad de la diversidad y la no competitividad.
Cuando ya parecía que todo había acabado hubo un nuevo cambio de instrumentos para la versión de Fisherman Blues de The waterboys, que interpretan con gran maestría respetando la original
Aún tuvieron tiempo de presentar un tema nuevo llamado The Witch the river and the storm toque folk cuya evolución deriva a un sonido muy a lo Led Zeppelin antes de culminar la noche a ritmo de Need, cuya intro enérgica de bajo y solo de guitarra dan como resultado un gran tema cañero para cerrar una gran velada.
Es de agradecer que haya bandas como Luback, capaces de atraparte entre sus raices country, de animarte a ritmo de rock y, sobre todo de hacer de la tarde del viernes la mejor velada posible.
