Olía a gran noche y así fue. Airbourne llenaron la Sala Gamma de Murcia a base de buen hard rock de la escuela de los primeros AC/DC. Un auténtico gustazo ver una sala tan grande con tanto público todos ellos coreando todos los éxitos del grupo australiano.
Pero antes de Airbourne salieron a escena sus compatriotas Desecrator, una propuesta algo más dura, más cercana al thrash metal, pero que hizo disfrutar de lo lindo al público que acercó a verlos. EL grupo salió a escena dispuesto a aprovechar al máximo su tiempo, y vaya si lo hicieron. Su buena puesta en escena, un magnífico sonido y su interacción con el público fueron algunos de los motivos por los que se llevaron varios nuevos seguidores murcianos. Sonaron temas como Serpent’s Return o To the Gallows, canción que da nombre a su último disco; así como un pequeño guiño al Born to be wild de Steppenwolf. Magnífico concierto que calentó muy bien el ambiente de cara al plato fuerte de la noche.
Airbourne no han inventado nada nuevo, pero lo que hacen lo hacen como pocos, por algo han llegado donde están. Además, cuando aportan ese toque de rock de estadio se meten al público en el bolsillo en un abrir y cerrar de ojos. Claro ejemplo de ello fue cuando Joel O’Keeffe se subió con su guitarra a la parte superior de la sala para acabar un riff rompiendo una lata de cerveza desde las alturas. ¿Pueden hacer algo más para conquistarnos? Pues sí, si se marcan un You Wreck Me como homenaje al recién fallecido Tom Petty, pues terminan por enamorar al más duro del lugar.
Tras hacernos cantar ese “oe, oe, oeeee” tan español y que tanto le gusta a los grupos extranjeros se toman un pequeño descanso para echarse un cubata en pleno escenario. Carisma y pose rockera 100%. Aunque tampoco nos hacen esperar demasiado para encaminarse a la
Sin lugar a dudas, fue una noche espectacular, con dos grandes grupos y muy buen ambiente. Ojalá más noches así.