rolling stones

Desde su comienzo en 1962, Los Rolling Stones se fraguaron una imagen de chicos malos que no estuvo exenta de escándalo. Su pelo, su ropa, sus letras y hasta su estilo de vida fueron objeto de crítica y burla por parte de los medios y la sociedad de los 60. Hasta tal punto fue esto que cuando hoy en día oímos hablar de “Sus Satánicas Majestades” sabemos perfectamente a quién nos referimos, pero, ¿de dónde nace semejante reconocimiento? ¡Sigue leyendo para descubrirlo!

Los Rolling Stones: la antítesis de Los Beatles

A finales de los años 50 y comienzos de los 60, Inglaterra ya acaparaba toda la atención de los medios musicales gracias a Los Beatles y su inconfundible sonido que llenaba las salas de medio planeta.
La música popular, tal y como la entendemos hoy en día, había comenzado su andadura pocos años atrás y los referentes musicales de aquellas generaciones todavía podían contarse con los dedos de las manos.
Sin embargo, la capital británica ya estaba preparando el despegue de otra banda que conseguiría mantener la atención mediática dentro de sus fronteras.
Ellos eran Los Rolling Stones y, en sus comienzos, su aire a Los Beatles era más que evidente: trajes de chaqueta, peinado tazón y un sonido tan digerible como su estética que, a pesar de todo, no duraría ni un abrir y cerrar de ojos.

rolling stones
De izquierda a derecha: Charlie Watts, Keith Richards, Bill Wyman, Mick Jagger y Brian Jones.

¿Por qué tener dos bandas iguales cuando puedes tener dos bandas antitéticas? Eso pensó Andrew Loog Oldham, el, por aquel entonces, mánager de Los Stones, que rápidamente tomó las riendas de la estética del grupo y consiguió los primeros titulares tildando a la banda como los chicos malos del rock.
Para finales de la primera mitad de los 60, Jagger, Richards y compañía ya habían llegado a Estados Unidos, donde su estilo y actitud tan diferente a lo que Gran Bretaña tenía acostumbrada a la nación americana, no fueron pasadas por alto.
El presentador, Dean Martin, se burlaba de ellos y de su pelo largo en el show Hollywood Palace. Y fueron sus letras y, en particular, su single (I Can’t Get No) Satisfaction los que asentaron su imagen de chicos malos.

Sus Satánicas Majestades autoproclamadas

Para 1965 y tras su single (I Can’t Get No) Satisfaction, la imagen “desaliñada” y contraria a la de Los Beatles comenzaba a dar sus frutos: los medios de comunicación y algunos sectores de la sociedad estaban en guerra abierta contra Los Rolling Stones.
Ese fue el caso del periódico británico The News Of The World, que señaló a Jagger como adicto a sustancias como el LSD.
Aunque el cantante de Los Stones demandó a dicho medio, ni él ni su compañero Keith Richards se libraron de pasar varios meses en la cárcel.
El 12 de febrero de 1967, el escuadrón antidrogas británico irrumpió en casa de Richards, donde éste, Jagger y varios amigos más disfrutaban de una fiesta tras una sesión de grabación.
El cantante y el guitarrista de Los Rolling Stones fueron arrestados y permanecerían entre rejas durante 3 meses, el primero, y un año, el segundo.

mick jagger
Mick Jagger

Sin embargo, este hecho dividiría a la sociedad británica: mientras las autoridades, medios de comunicación y sectores conservadores se posicionaban a favor de la condena, sus compañeros artistas y sus fans se manifestaban pidiendo sacar a los músicos de la cárcel.
Finalmente, gracias a estas protestas, Jagger y Richards saldrían de prisión tras un mes de permanecer en ella.

Estos eventos serían la inspiración de Los Stones para titular su próximo álbum como Their Satanic Majesties Request, que, a pesar de no obtener buenos números, serviría para otorgar a la banda su apodo más sonado hasta el momento: Sus Satánicas Majestades, reirse de todos aquellos que les criticaron y lucir con orgullo esa apariencia de chicos malos que tantos problemas les había acarreado pero que tantos éxitos les estaba por traer.