2017 ha sido, para quien escribe estas líneas, un año marcado por la apertura musical. No fueron sino los discos que más escuché el pasado 2016 los que despertaron en mí la inquietud que me ha llevado, durante el presente año, a entender la música más allá de etiquetas, dejando de lado la palabrería que tanto empleamos en los medios para intentar describir cada propuesta musical a nuevos oyentes. 2017 ha sido, por consiguiente, el año en que más complicado me ha sido elegir álbumes, o lanzamientos, favoritos. Con la siguiente lista persigo, por encima de cualquier pretensión, compartir con vosotros la música que, durante todo este tiempo, ha marcado en mí un cambio personal muy significativo.
10. tricot – 3
Mete en una coctelera math rock, pop y punk. Lo de tricot en su tercer álbum es puro carácter. La insuperable técnica característica del trío femenino japonés puesta, en todo momento, al servicio de una elegancia, energía y sensibilidad para las composiciones poco habitual en propuestas estilísticas similares.
9. Ex Eye – Ex Eye
Me interesé por este proyecto de superbanda al saber que contaba, entre sus filas, con Colin Stetson, saxofonista de David Gilmour y Bon Iver, entre otros muchos. La sorpresa que me llevé al escucharlos por primera vez no pudo ser mayor. Intentar describirlos se me hace complicado incluso en términos estrictamente musicales. El jazz más oscuro y pesado que vayas escuchar en tu vida. Al menos hasta que saquen un segundo trabajo.
8. Leprous – Malina
A pesar de ser un álbum al que le pesan demasiado sus temas menores, el nuevo rumbo sonoro de la banda noruega me parece el mayor acierto que han tomado después del camino que decidieron explorar con Coal. Por suerte, en lo último de Leprous no faltan los motivos para seguir prestando atención a cada paso que dan.
7. Ulver – The Assassination of Julius Caesar
Ulver
llevan colándose en mis rankings anuales desde que los conocí con Messe I.X-VI.X. Y este año no iba a ser una excepción. Han vuelto a pegar un volantazo de los que te parten el cuello. Su último lanzamiento los vuelve a situar en las antípodas, no sólo de su pasado dentro del metal, sino de cualquiera de las múltiples facetas que hayan adoptado durante su carrera. Para muestra, un botón:
6. Converge – The Dusk In Us
Pocas bandas conozco con una carrera tan sólida y robusta como la de Converge. Después de casi veinte años de historia a sus espaldas y varios álbumes convertidos ya en verdaderos clásicos, son capaces de sacar un nuevo lanzamiento con algunas de las mejores canciones de la formanción.
5. Aiming for Enrike – Las Napalmas
Mi gran descubrimiento del año pasado. Dúo formado por Tobias Ørnes, antiguo batería de Leprous, y Simen Følstad, un señor que se pasa más tiempo agachado trasteando pedales que tocando la guitarra. No hay palabras para definir la habilidad de ambos músicos para convertir una propuesta tan técnica en la música más divertida que he tenido el placer de escuchar este 2017.
4. Pallbearer – Heartless
Que una banda como Pallbearer haya conseguido con su tercer álbum rebasar el nivel de emotividad presente en sus dos anteriores obras dice mucho del último disco de los de Arkansas. La permeabilidad estilística presente en Heartless configura, hasta la fecha, la obra más compleja, dinámica y estremecedora de la banda.
3. Forest Swords – Compassion
Con el puesto de bronce me permito el lujo de romper completamente con la línea temática del medio incluyendo un álbum alejado del mundo del rock. Matthew Barnes es la mente detrás de Forest Swords, proyecto a medio camino entre la música experimental, el dub y la electrónica. El desasosiego y la serenidad, la inquietud y el reposo, la ansiedad y la calma; elementos enfrentados que configuran un álbum cuasi ritaulístico.
2. The Contortionist – Clairvoyant
The Contortionist
y Clairvoyant: The Contortionist y el álbum más redondo de la banda de Indiana. No sólo han eliminado de su propuesta aquellos elementos que les llevaban a momentos de cierta dispersión en lanzamientos anteriores, sino que han alcanzado un equilibrio entre técnica, emotividad, accesibilidad y profundidad insuperable e inigualable.
1. Amenra – MASS VI
Desde que salió Children of the Eye, cada adelanto, y posteriormente el álbum completo, ha estado en bucle en mi reproductor. Sigo sin comprender cómo, con una propuesta tan decididamente continuista, cada lanzamiento de Amenra logra generar en sus oyentes habituales (y en los recién llegados) sensaciones de una profundidad incomparable.