Mejores discos de 2020 para: Albert Lloret

Mejores discos de 2020 para Albert Lloret

Tras este año tan apocalíptico, no queda más que agradecer vuestra presencia y lealtad a Rock Culture y por nuestra parte no nos queda otra que asistir a nuestra cita anual para enseñaros los que han sido nuestros discos favoritos del año.

10. 2020 – Bon Jovi

Titular un disco con el número del que probablemente sea el peor año de las últimas cinco décadas tiene mérito, pero más mérito tiene para este grupo que no necesita presentación haber sacado su mejor disco en veinte años. La trayectoria de Bon Jovi desde su álbum Crush —con su correspondiente It’s My Life— ha sido de altibajos constantes, con más bajos que altos, pero finalmente han conseguido sacar la esencia que llevaban años intentando sacar, incluso sin Richie Sambora, y han logrado un excelente disco capaz de gustar a aquellas personas que llevan años aborreciendo a la banda.

9. POST HUMAN: SURVIVAL HORROR – Bring Me The Horizon

Post Human: Survival Horror; reseña del nuevo trabajo de Bring Me The Horizon

Llevaba tiempo sintiendo una total indiferencia por cualquier cosa que sacaran los de Sheffield, pero reconozco que este disco impactó fuerte teniendo en cuenta la aversión que siento hacia personajes como Yungblud o grupos como Baby Metal. No se puede decir nada que no se haya dicho ya, pero BMTH han conseguido tomar lo que una vez fueron y les llevó al éxito y mezclarlo con aquello que llevan tiempo intentando ser. Y me quito el sombrero ante ellos.

8. Starting Over – Chris Stapleton

No va a llevarse el premio a mejor portada del año, pero tras cinco largos años desde su primer disco de estudio como tal, sin contar dos de acústicos, la vuelta de Stapleton al mundo ha sido arrolladora. No solo se ha centrado en ese country lento típico de Nashville si no que ha empezado a tantear un rock sureño cercano a los últimos Lynyrd Skynyrd. Esperemos que esta su próximo disco no tarde otros cinco años, porque a este paso no llegamos.

7. La vida és ara – Pau Vallvé

Lo que más me gusta de este disco es su origen. Pau Vallvé se separó de su pareja días antes de que todo estallase en marzo. El confinamiento le cogió desprevenido viviendo en su estudio del barrio de Gràcia, en Barcelona, y el destino le llevó a componer y grabar él mismo el que probablemente sea su mejor trabajo hasta ahora. Ora et labora en letras mayúsculas. De un disco post-ruptura todo el mundo espera canciones tristes, pero todo lo contrario; Vallvé nos demuestra que siempre hay que sentirse vivo y no hay que perder el tiempo entre la tristeza y el enfado.

6. Letter to You – Bruce Springsteen

Cualquier fan de Springsteen se temía lo peor con este disco tras la tremenda aberración que fue Western Stars (delito que ya ha prescrito). A Bruce lo podemos llamar por su nombre de pila porque ya es nuestro amigo, siempre lo ha sido, y con este disco se reafirma el hecho de que, como un buen amigo, aunque de vez en cuando desaparezca un tiempo y vuelva para dar por saco con sus tonterías, siempre tiene algo excelente que ofrecer. Y si eso que nos trae viene acompañado por la E Street Band, mejor.

5. Lament – Touché Amoré

Cualquier año que TA saquen disco será un buen año. Aún seguimos recuperándonos de la historia de Stage Four pero este disco nos hace olvidar, en parte, todo el dolor que el mundo puede ofrecernos. Además, su sencillo Reminders tiene el que probablemente sea el mejor videoclip del año. No hace falta decir nada más.

4. Abyss – Unleash The Archers

Reseña: Unleash The Archers – Abyss

Ya hablamos en Rock Culture lo bueno que era este disco y el golpe en la mesa que ha supuesto para el power metal. Era obvio que se merecía estar dentro del Top 5. Un disco conceptual como debe ser —pero sin creernos Pink Floyd, que esto sigue siendo power metal— y una de las mejores voces femeninas de este siglo.

3. From Exile – The Menzingers

El año pasado, Hello Exile, de este mismo grupo ocupaba el primer puesto en el top anual y en mi corazón. Este año hubiera hecho lo mismo (aunque sigue el primero en mi corazón) pero hay que tener en cuenta que es una “reimaginación” de Hello Exile en clave de confinamiento. Pero aún así el giro que dan a las canciones es tan brusco y tan alejado del típico unplugged que podríamos considerarlo como un disco aparte y, por consiguiente, el tercer mejor disco del año.

2. Local Honey – Brian Fallon

Yo, que me autodeclaro el seguidor más acérrimo e incondicional de Brian Fallon y de todo lo que haga, reconozco que este disco necesitó unas cuantas escuchas (quizá más de cinco) para que entrase. Tras sus dos primeros discos en solitario esperaba algo parecido, pero el puñetazo de realidad que nos ha dado Fallon era necesario. Con este disco nos enseña que así es como él hace las canciones antes de llevarlas a cabo con The Gaslight Anthem o su banda en solitario: crudas, puras y áridas. La quintaesencia de la madurez que Fallon llevaba tiempo buscando junto al paso del tiempo y la paternidad.

1. Brave Faces Everyone – Spanish Love Songs

Por razones que desconozco (quizá no terminaba de entender el nombre del grupo) tardé tiempo en escucharlos. La primera vez que lo hice fue con un disco de hace dos años, pero cuando sacaron esta obra maestra —no exagero, lo es— aluciné viendo cómo un grupo tan joven puede hacer algo tan bueno. Hay grupos que necesitan años para conseguir lo que ellos han hecho en tres discos, y tampoco quiero explicar nada de este disco para que quien se atreva pueda disfrutarlo desde cero, al igual que hice yo. Pero me corto una mano si a alguien no le gusta este disco.